A estas alturas del año es habitual encontrarnos con noticias sobre las perspectivas de bolsa para el año entrante por parte los distintos bancos de inversión. Habitualmente, en este tipo de análisis predominan las visiones positivas y, dentro del sector, siempre se especula con el potencial de más del 10%.

Curiosamente, en esta ocasión tengo la sensación de que en estas últimas semanas hay menos noticias en prensa sobre las perspectivas bursátiles para 2018, lo que podría indicar que el optimismo para el próximo ejercicio es algo menor.

Sin embargo, me inclino a creer que la incertidumbre sobre el resultado de las elecciones en Cataluña llama a la prudencia a los brokeres, que se muestran más reticentes a ofrecer su opinión sobre las expectativas del año que viene.

La incertidumbre sobre el resultado de las elecciones en Cataluña llama a la prudencia a los brókeres, más reticentes a ofrecer su opinión

Desde Mirabaud creemos que las perspectivas de la bolsa española para 2018 son, en general, positivas, gracias a un favorable entorno macro con unas estimaciones de beneficios y unos múltiplos razonables.

El entorno macro global es favorable para la bolsa, con un crecimiento económico que se ha extendido a todas las áreas, entre las que destaca la Eurozona que vuelve a crecer a su mayor ritmo desde el inicio de la crisis, apoyada en la demanda interna y con un crecimiento equilibrado entre países core y periféricos. Todo ello, en un escenario de inflaciones reducidas que están permitiendo la normalización progresiva de los tipos de interés en EEUU, mientras se van reduciendo estímulos monetarios en otras zonas de forma muy gradual.

Las expectativas de crecimiento para España son muy alentadoras gracias a las previsiones de incremento del PIB por encima del 2,5% y el buen comportamiento de Brasil, que tanta repercusión tiene en la bolsa española.

Las perspectivas de beneficios y múltiplos razonables, en un entorno macro positivo, deberían permitir afrontar un año sin excesivos sobresaltos

Las estimaciones de beneficios del consenso para las empresas españolas parecen mucho más razonables que en años anteriores, lo que debería permitir que no tengamos que asistir a la tradicional rebaja de previsiones que hemos visto en los últimos ejercicios. Asimismo, los multiplicadores de la bolsa española se han vuelto a situar cerca de medias históricas y por debajo de los principales índices europeos, cuando históricamente han cotizado con primas.

Unas perspectivas de beneficios y unos múltiplos razonables en un entorno macro favorable deberían permitir afrontar un año sin excesivos sobresaltos, con unos riesgos a la baja muy acotados y con el potencial de la mejora de resultados o/y expansión de múltiplos a favor.En definitiva, nos encontramos ante uno de los mejores escenarios bursátiles posibles de los últimos años.

Sin embargo, en los más de 20 años que llevo en esta industria he podido comprobar que el camino nunca está despejado de incertidumbres y 2018 no va a ser una excepción. Las buenas expectativas deberán hacer frente a la incertidumbre política en Cataluña, el Brexit, etc. y otras que iremos descubriendo a medida que vayamos avanzando en el año.


Ignacio Méndez es director de Análisis de Mirabaud Securities en España