Ada Colau se ha entrevistado a sí misma para un vídeo electoral, entre Eddie Murphy y ese erotismo del poder reducido ya a autoerotismo por la necesidad. La gente que se quiere y se busca ante los espejos es triste, como la gente que se da baños con velitas. No es ego sino soledad lo que les lleva a ser su propio amante, su propio altar, su propio ajedrez y hasta su propio desaire.

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