Los horribles sucesos acaecidos el pasado fin de semana en distintos puntos de Israel, en los que terroristas del grupo islamista Hamás asesinaron a casi 2.000 civiles inocentes, varios centenares de los cuales eran jóvenes, hombres y mujeres, que asistían a un concierto de música electrónica por la paz, han devuelto a nuestros ojos imágenes de especial crudeza: jóvenes violadas y torturadas y bebés asesinados del lado judío, pero también civiles palestinos inocentes, muchos de ellos niños pequeños, que han sufrido la represión y el castigo por parte de fuerzas del ejército israelí.

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