La sabiduría popular reza que las segundas partes nunca fueron buenas. Y la historia está salpicada de innumerables ejemplos que refrendan este dicho. Pero también son muchas las excepciones. Y entre ellas se puede enumerar el caso de PayPal.
Te puede interesar
-
BBVA conquista los 100.000 millones de valor en Bolsa dos semanas después del desenlace de la opa
-
La catapulta militar de Indra: vale un 195% más en bolsa en un año
-
El mercado de capitales, la asignatura pendiente de las pymes españolas
-
¿Se acabó la fiesta de las empresas europeas de defensa en bolsa?
Lo más visto