La Plaza de la Revolución de La Habana (Cuba) congregó ayer a cientos de personas que acudieron a despedir a Fidel Castro, que murió el pasado viernes, 25 de noviembre, a los 90 años de edad. Los restos del dictador han sido incinerados. El luto oficial en el país caribeño durará hasta el domingo, cuando se celebrará un funeral oficial. Desde veteranos de la Revolución, pasando por ex combatientes de la guerra de Angola, hasta estudiantes han rendido homenaje a Castro, mientras en el resto del mundo se esperan con atención los siguientes movimientos del régimen castrista.