La presidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell, ha vuelvo a insistir en que su actuación al permitir la votación tras el 9-N estaba dentro de la legalidad y ha criticado que el Estado "utilice a los tribunales para impedir los debates". Con estas palabras se ha dirigido a los medios este viernes en el Parlamento catalán tras declarar por desobediencia en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). En su comparecencia, además, ha lamentado que este proceso haya ocurrido en un Estado democrático "no porque nos creamos que estamos por encima de la ley, sino porque no se puede perseguir por vía penal un debate parlamentario".

Forcadell ha explicado en su declaración ante el juez que "ningún tribunal puede impedir que en el Parlament se debata sobre la independencia de Cataluña ni sobre nada de lo que implica a los catalanes", según sus palabras, y ha acusado al Gobierno de querer censurar al Parlament: "Pretende dictar de lo que se puede hablar o no y eso no pasara", ha sentenciado.

La presidenta del Parlamento catalán no ha respondido a las preguntas de la instructora ni los dos fiscales presentes en su declaración ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) por la acusación de desobediencia al Tribunal Constitucional al permitir la votación en el Pleno de un texto derivado de la resolución del 9-N, anulada por el alto tribunal.

Forcadell sí ha respondido a la preguntas de su abogado, Andreu Van den Eynde, en una declaración de poco más de media hora a la que han asistido la magistrada Maria Eugenia Alegret, de la conservadora Asociación Profesional de la Magistratura, el fiscal Superior de Cataluña, José María Romero de Tejada, y el teniente fiscal Francisco Bañares.

Según fuentes de la defensa, la presidenta del Parlament ha recordado a la magistrada y a los fiscales que tienen la obligación de garantizar su inviolabilidad como cargo público y ha argumentado que las conclusiones de la comisión que han originado la querella se cerraron antes de que el TC hiciera su advertencia. Además ha restado peso al informe en el que los letrados de la Cámara advertían de las consecuencias de la votación investigada ahora, letrados que ya han declarado ante la instructora para afirmar que advirtieron de las consecuencias legales de la votación.

Por su parte, el vicepresidente catalán, Oriol Junqueras, ha insistido en el lema escogido para la concentración: “esto va de democracia” y ha señalado que “el Estado persigue a nuestras instituciones y pone trabas económicas, pero nuestras instituciones siguen en pie y la economía catalana crece".

Forcadell ha llegado a las puertas del TSJC arropada por centenares de ciudadanos y, sobre todo, por cargos políticos de JxS, la CUP y CSQP convocados por las organizaciones independentistas para dar apoyo a la presidenta del Parlament. La ANC, Ómnium y la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI) han convertido la declaración ante la justicia de Forcadell en una demostración de fuerza y unidad independentista con la ayuda del Gobierno de la Generalitat.

Iglesias y Colau en apoyo a Forcadell

A las ocho de la mañana, la presidenta ha sido arropada en el Parlament por el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y todo su ejecutivo, además del primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Gerardo Pisaerllo, los diputados de JxS y la CUP, el ex president Artur Mas y ex presidentes del Parlament. A las puertas de la Cámara, unos 400 alcaldes -vara de mando en mano- esperaban a la comitiva para acompañarla hasta el TSJC, separado del Parlament por unos centenares de metros.

Además, ha contado con el apoyo de los líderes de Podemos en las redes. Pablo Iglesias ha asegurado el tuiter sentir "vergüenza como español y como demócrata" por la causa contra la presidenta del Parlament, e Iñigo Errejon advertía en la misma red: "Forcadell será juzgada por permitir una votación que convoca un referéndum. Demofobia". Por su parte, la alcaldesa de Barcelona participó ayer noche en un acto de apoyo a Forcadell, en el que aseguró que "con ella se está juzgando a todo un pueblo".

Conscientes como siempre de la importancia de las imágenes, la comitiva se ha detenido ante la estatua ecuestre del General Prim para posar tras la palabra "democracia", posado que han repetido ante las puertas del TSJC. Puigdemont ha dejado la marcha antes de llegar al tribunal pero el resto de su gobierno, encabezado por Oriol Junqueras, se ha manifestado ante las puertas del TSJC.

El alto tribunal ya se manifestó en contra de este tipo de concentraciones que, en opinión del TSJC, cuestionan la independencia de la justicia, cuando hace un año se produjo por primera vez una imagen similar con motivo de la declaración de Artur Mas, Joana Ortega e Irene Rigau por la celebración de la consulta del 9-N.