Lo han hecho durante toda la madrugada y de modo clandestino, sin autorización municipal para ello. Es lo que han definido como un nuevo “desafío” a las instituciones municipales para que cumplan con su compromiso de honrar a las víctimas de la violencia terrorista. Recorriendo los lugares en los que ETA, y en menor medida los GAL o la Triple AAA, asesinó a 86 personas, los miembros del Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) han colocado 62 placas “clandestinas” en su recuerdo, en las que además del nombre de la víctima y del grupo que la mató se puede leer la fecha en la que fue asesinada. En este 11 de marzo,  día Europeo en recuerdo de las víctimas del Terrorismo, esta acción de “activismo pacífico” ha hecho que Bilbao y San Sebastián amanezcan con decenas de placas colocadas a lo largo de sus calles, señalizando los lugares donde se cometieron los atentados, y en recuerdo a todas las víctimas provocadas por el terrorismo.

Con esta acción Covite insiste en exigir a los ayuntamientos de la capital vizcaína y guipuzcoana el cumplimiento de los compromisos adquiridos hace más de dos años para honrar la memoria de las víctimas del terrorismo, “si las instituciones no recuerdan a las víctimas lo haremos nosotros”. En una nota el colectivo ha recordado que el actual alcalde de Bilbao, Juan María Aburto, sigue incumpliendo lo prometido por su antecesor, Ibon Areso, también del PNV, de recordar con una placa a las 48 víctimas del terrorismo ocurridas en la ciudad. Denuncian además cómo en acciones similares llevadas a cabo con anterioridad -aunque de menor dimensión- los servicios municipales procedieron a retirar las placas colocadas, algo que temen que vuelva a ocurrir con las insignias instaladas esta noche en decenas de puntos de la ciudad.

Con esta actuación Covite cumple el ultimátum que lanzó a Aburto en diciembre del año pasado en el que aseguró que si en el plazo de 15 días no procedía a hacer efectivo el compromiso adquirido en recuerdo a las víctimas procedería a colocar los distintivos de manera personal. El alcalde ya les anunció entonces que de hacerlo debería proceder a su retirada. Aburto defiende la necesidad de abordar esta cuestión de otro modo “sin espectáculos”, según los definió en diciembre del año pasado, y en el seno de un foro de víctimas donde se pueda acordar el mejor modo de honrar su memoria.

Tanto el Ayuntamiento de Bilbao como el de San Sebastián han ordenado la retirada de las placas

El alcalde de Bilbao, Juan María Aburto, ha ordenado esta mañana la retirada de las placas por incumplir la ordenanza municipal. Además, el primer edil ha calificado de "provocación" la acción impulsada por Covite y ha apelado a la necesidad de buscar el entendimiento en esta materia en un foro adecuado. Para Aburto, "no es de recibo" que se ponga en cuestión la actitud de apoyo y solidaridad del consistorio con las víctimas. Ha recordado que ayer el Ayuntamiento de la capital vizcaína participó en el acto institucional organizado en Vitoria con motivo del día europeo de apoyo a las víctimas del terrorismo. Ha añadido que Bilbao es "un referente" en el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica y de reconocimiento a las víctimas.

Autorización expresa de las familias

Bilbao, como otros muchos municipios, ha realizado varios actos de recuerdo a las víctimas del terrorismo y la violencia en general. En el último de ellos, celebrado ante el monolito que en su recuerdo existe en el céntrico Parque de Doña Casilda de la capital vizcaína, participó la totalidad de los partidos con representación en el Ayuntamiento, incluida la izquierda abertzale.

Desde Covite aseguran que también en San Sebastián, donde se han colocado 14 placas esta noche, se está incumpliendo este compromiso. Ya en mayo del año pasado se instalaron decenas de placas en recuerdo de los 96 asesinados en esta ciudad y que salvo en algunos casos “apenas duraron horas o días colocadas”. En abril de 2014 el pleno municipal acordó en pleno instalar placas en recuerdo de las víctimas pero, por el momento, no se ha cumplido. El alcalde Eneko Goia (PNV) justificó la demora en la necesidad de que las familias de las víctimas estuvieran de acuerdo. Covite remitió poco después a Goia el consentimiento de al menos 18 familias de víctimas del terrorismo. En la actuación llevada a cabo esta noche, Covite ha recabado el respaldo explícito de algunas familias, si bien no de la mayor parte de ellas. Entre las insignias colocadas figuran la de Miguel Paredes y Elena Moreno, que ha sido retirada en tres ocasiones anteriores pero que ha vuelto a ser colocada por su hija.

Hoy el Ayuntamiento de San Sebastián ha anunciado que retirará las placas instaladas por el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) porque "incumplen" la normativa municipal, y ha considerado que "éste no es el camino" para trabajar la memoria "ni el deseo de muchos familiares" de los asesinados.

La aparición de estas placas en recuerdo a las víctimas del terrorismo se produce justo un día después de que instituciones y colectivos sociales y culturales secundaran en Vitoria la concentración de cuatro horas en su recuerdo organizada por el Gobierno vasco en la plaza de la Virgen Blanca de Vitoria bajo el lema "Elkarrekin eraiki (construyendo juntos), Memoria y futuro". La concentración se desarrolló en silencio, interrumpida cada quince minutos por un cuarteto de violines y violonchelos, en la que los diferentes colectivos, en turnos de 15 minutos, se cedieron un testigo con un mensaje en su interior. En él el Gobierno vasco reconocía que "no siempre lo que hicimos estuvo bien hecho" y asumiendo que "debimos reaccionar antes y hacerlo mejor y más unidos". El Ejecutivo se compromete a promover la "verdad, justicia y reparación" en "igualdad de derechos" para todas las víctimas y "sin equiparaciones". Por último, manifestaba que "el final de ETA no puede suponer pasar página sin crítica explicita sobre lo sucedido".