El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha rechazado la oferta de acudir al Congreso de los Diputados a exponer su propuesta de referéndum independentista sin tener antes el beneplácito del Gobierno para celebrarlo. En otras palabras, el presidente de la Generalitat no acudirá a las Cortes a solicitar el plácet para su proyecto secesionista, como hicieron en su momento Juan José Ibarretxe o Artur Mas, por delegación. Puigdemont sólo está dispuesto a llevar al Congreso un acuerdo ya cerrado con el Gobierno.

Tras las declaraciones de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que después del Consejo de Ministros ha abogado por que el presidente de la Generalitat plantee sus propuestas en el Congreso, Puigdemont ha celebrado "el cambio de tono" apreciado en Santamaría  y "sobre todo, que el Gobierno reconozca la posibilidad de celebrar un referéndum de autodeterminación en Cataluña".

Se votará en el Congreso y el Parlament

Con esta lectura de las palabras de la vicepresidenta, Puigdemont ha anunciado, acompañado por el vicepresidente catalán y líder de ERC, Oriol Junqueras, que su gobierno mantendrá el programa previsto y "trasladará al Gobierno la propuesta para hacer efectivo este referéndum acordado, tal como propone el pacto por el referéndum con el aval de centenares de miles de apoyos".

Solo en caso de que ambos ejecutivos llegaran a un acuerdo sobre le términos en los que debe celebrarse el referéndum, Puigdemont estaría dispuesto a acudir al Congreso de los Diputados para que esta cámara, al igual que el Parlamento autonómico, apruebe la propuesta pactada por Gobierno y Generalitat. "En caso de acuerdo los dos gobiernos someterán el pacto a los respectivos parlamentos", es decir, el Congreso de los Diputados y el Parlament.

Junqueras, por su parte, ha insistido en reivindicar "el derecho irrenunciable a la autodeterminación y el compromiso a ejercerlo" por parte del ejecutivo catalán. El líder de ESquerra ha reiterado además la invitación a conferencia "y pedimos que se retiren las querellas por debatir el mismo tema que el Gobierno ha debatido hoy en el Consejo de Ministros".

Puigdemont y Junqueras han hecho estas valoraciones momentos antes de iniciarse el acto de presentación de las conclusiones del Pacto por el Referéndum que ha presentado un balance de 500.000 firmas, entre las que se cuentan particulares y entidades como el F. C. Barcelona. Su presidente, el ex alcalde socialista Joan Ignasi Elena, ha defendido el trabajo de esta plataforma en defensa de una consulta "pactada" con el Gobierno y la legitimidad de la reivindicación del referéndum, que ha asegurado que es una reclamación "transversal" a toda la sociedad catalana.

Los comunes defienden ir al Congreso

Sin embargo, el líder de EnComúPodem en el Congreso y coordinador de los 'comuns', Xavier Domènech, ha pedido al presidente de la Generalitat que acepte la oferta del Gobierno y vaya a la Cámara Baja a defender un referéndum: "La batalla por el derecho a decidir se debe librar en todas partes". Domènech ha calificado de positiva la oferta de Santamaría aunque considera que debió llegar antes, y ha pedido al Gobierno que acompañe esta propuesta optando también por renunciar a todos los procesos judiciales que pesan contra soberanistas.

"No se puede tener una cara amable y judicializar la política catalana a la vez", según Domènech, quien ha destacado que actualmente el escenario en el Congreso es diferente de cuando en 2014 rechazó la consulta soberanista que propuso el Parlament: ahora hay al menos "un tercio" de la Cámara Baja que avala el referéndum, ha dicho en alusión al apoyo que le da Podemos.