El Jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, ha hecho una referencia más que velada al recién clausurado congreso federal del PSOE. En un desayuno informativo con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, Rajoy ha apelado a la "moderación, tranquilidad, concordia y buenas formas" en la política. En un corrillo posterior con los periodistas ha explicado que su obligación es intentar construir consensos con el líder socialista en temas de Estado, "que es lo que reclaman los ciudadanos", pero no por ello había dejado de ser crítico en las palabras pronunciadas poco antes en la presentación de Cifuentes.

Le presidente del gobierno no ha querido entrar en concreciones, pero su intención es hacer frente común con el PSOE y con Ciudadanos para frenar la consulta secesionista, por lo que no tardará en ponerse en contacto con ambos.

En una cita donde se han reunido miembros del Gobierno, representantes las altas instituciones del Estado, de la dirección  del PP y buena parte de los dirigentes de la oposición en la Comunidad de Madrid, Rajoy ha dado réplica a la pretensión de Pedro Sánchez, al que no ha citado por su nombre, de intentar organizar una alternativa al Ejecutivo popular con el concurso de Podemos y de Ciudadanos con el argumento reiterado de que es necesario "dejar el extremismo, el griterío, el radicalismo y la falta de moderación".

Ha defendido en el desayuno organizado por Nueva Economía Forum  la "mesura", que, a su juicio, necesita el momento actual y no la "crispación o crear problemas donde no los hay de manera inútil", cuando hay por delante retos como el de la recuperación económica, el terrorismo yihadista o el Brexit. En definitiva, cree que presidente del Gobierno que "lo demás es una forma de perder el tiempo nada positiva".