Fue uno de los hombres fuertes de las finanzas deETA. Muchos empresarios extorsionados debía preguntar por él para formalizar el pago de la extorsión a la que les sometía la banda a cambio de su vida. Pagar el llamado impuesto revolucionario conllevaba viajar al País Vasco francés y preguntar por el señor Robles. En realidad se llamaba, y se llama, Eloy Uriarte Diáz de Guereño. El pasado viernes fue recibido como un héroe en su pueblo, Soraluce (Guipúzcoa), el mismo del que huyó escapando de la guardia civil el 11 de septiembre de 1974, con 34 años, y al que ahora ha regresado con 72.

 

Llegó junto a su mujer Izaskun y recorrió entre aplausos y abrazos la plaza principal del municipio. Entre quienes se acercaron a saludarle, Josu Zabarte, el 'carnicero de Mondragón'. En la plaza del pueblo, el protocolo de bienvenida habtitual a los miembros de ETA que salen de prisión o que, como es su caso, regresan después de años de "exílio" y "destierro", como lo calificaron sus partidarios. Terminado el pasacalles, al son de las campanas de la iglesia y entre ikurriñas, esteladas y pancartas en contra de la dispersión de los presos, discursos, aurresku de bienvenida y la retirada de su imagen en el 'gaztetxe' de la localidad donde se recuerda a los presos de ETA.

Con estatuto de 'refugiado'

El 'señor Robles' acumula una dilatada trayectoria de vínculos con ETA y arrestos y pasos por la cárcel. Durante los años 80 formó parte del aparato financiero de la banda. Tras huir a Francia después de la desarticulación del comando 'Urko' que operaba en Gupúzcoa, Uriarte (Soraluce 1942) fue detenido en 1976 durante una redada llevada a cabo en el País Vasco francés. Encarcelado seis meses, años despúes fue de nuevo arrestado y encarcelado en Bayona. España pidió sin éxito su extradición. Francia llegó a concederle en 1985 el estatuto de refugiado político que años después le retoraría, en 1991.

El nombre de Uriarte Díaz de Guereñu apareció en los papeles localizados en la operación llevada a cabo contra la empresa Sokoa en Hendaya y por la que fue reclamado a Francia por la Audiencia Nacional. Su último arresto se remonta al año 2006 cuando una operación llevada a cabo en el país galo se cerró con doce detenidos vinculados al aparato de finanzas de ETA.

Ha disfrutado en los últimos años de una libertad ckndicionada y confinada a residir alejado del sur de Francia. En los últimos años en cambio ha vivido en Biarritz. Ha formado parte del colectivo de "Refugiados políticos vascos" para los que el entorno radical también reclama que se les permita el regreso al País Vasco.