Carles Puigdemont y los ex consellers, que se encuentran ahora mismo en Bruselas, tendrán que declarar el próximo día 17 de noviembre ante un tribunal en Bélgica (la Cámara del Consejo de Bruselas), tal y como informa la agencia AFP. Será esta cámara la que valore la petición de transferencia a España de todos ellos para ser juzgados por rebelión, sedición y otros delitos.

Tanto el ex president de la Generalitat como sus cuatro ex consejeros del gobierno catalán que le acompañan en Bruselas han quedado en libertad con obligación de comparecer ante la justicia belga cada vez que se les requiera, después de declarar ante el juez, una vez que en la mañana de este domingo se entregaban a la justicia belga.

Todo ellos habían declarado desde las 16.00 hora local hasta las 20.00 del domingo, por separado, y abandonaron la Fiscalía de Bruselas todos juntos en un minibús. A la salida de la Fiscalía no ha habido declaraciones, ni de Puigdemont ni de sus exconsejeros.

Entre las medidas cautelares dictadas por el juez, destaca la prohibición de salir al extranjero sin permiso del juez de instrucción. Además, figuran la obligación de comunicar una dirección de residencia y la de asistir personalmente a cada una de las audiencias a las que se les convoque.