Los siete partidos en liza han recuperado los bloques en el debate de TV3. Si el domingo afloraron las rivalidades entre JxCat y ERC, en esta ocasión los partidos independentistas se han centrado de nuevo en el discurso de la "represión" del Estado para reclamar el apoyo de los votantes con el único objetivo de "restituir" al gobierno de Carles Puigdemont. "Estas elecciones van de restituir al president Puigdemont o escoger a un presidente del 155" ha clamado el candidato de JxCat, Jordi Turull.

Los peores enfrentamientos se han producido, en consonancia, entre las representantes de C's, Inés Arrimadas, y ERC, Marta Rovira. La republicana ha afeado a Arrimadas los casos de corrupción del PP, pese a los cuales "todos los corruptos están en libertad mientras Junqueras sigue en la cárcel". Y la segunda le ha recriminado la denuncia nunca probada sobre las amenazas de sangre en las calles del Gobierno. "Habéis pasado del España nos roba al España nos mata".

La restitución del Govern ha sido prácticamente el único argumento del representante de Puigdemont, pero también Marta Rovira, ha entrado en la defensa del gobierno saliente y ha defendido como propuesta de programa revertir todos los efectos del 155. Sólo en el mensaje final, Rovira ha reivindicado a ERC como el único voto útil para frenar a C's, y evitar al victoria de un partido constitucionalista.

No ha entrado en la controversia sobre la necesidad de investir de nuevo a Puigdemont como exige JxCat a ERC, argumento que ha repetido Turull hasta el punto de anunciar que su primera medida de gobierno si gana será "el regreso de Puigdemont para nombrar al gobierno cesado".  Un debate, el de plantear las elecciones como un plebiscito entre Puigdemont y Rajoy, DUI o 155, que paradójicamente han abierto los representantes del PSC, Miquel Iceta, y CeC, Xavier Doménech.

El debate planteado entorno a quién es el responsable de la crisis catalana en su inicio ha llevado a reabrir la batalla entre independentistas en defensa del 1-O y la declaración de independencia, y constitucionalistas que han insistido en que el 6 y 7 de septiembre la mayoría soberanista hizo saltar por los aires el marco constitucional y estatutario.

Inés Arrimadas ha reciminado al "tripartito separatista" su incapacidad para proponer un programa político más allá de la investidura de Puigdemont "que no asume ni Oriol Junqueras" y ha abogado por escoger "un nuevo gobierno y un nuevo Parlament" para revertir la situación.  

Una recriminación que ha abierto el debate sobre los programas, en el que la discusión ha vuelto, por obra de Turull, al déficit fiscal. "Tenemos un estado en contra" se ha lamentado el ex conseller de Presidencia para argumentar que las políticas sociales "necesitan capacidad normativa y financiera" y recriminar al Gobierno la anulación vía Tribunal Constitucional de la mitad de las leyes aprobadas esta legislatura.

Un argumento que ha rebatido Iceta recordando que el propio Andreu Mas Colell, conseller de Economía de Artur Mas, reconoció que el déficit fiscal era de 2.400 millones de euros, no de 16.000 como han insistido Turull y Rovira. "Siempre están con el invento del TBO que intenta proyectar frustración e impotencia" ha lamentado tras recriminarles su renuncia a negociar el nuevo sistema de financiación "por fiarlo todo a una arcadia feliz en la que ataremos los perros con longanizas".

La gran propuesta de Domènech, ya avanzada durante la campaña, es la de conformar un gobierno catalanista y de izquierdas, en el que sin citarlos ha señalado a ERC y PSC, que actúe como "avanzadilla" para echar del Gobierno al PP de Mariano Rajoy. Para el candidato de la CUP, Carles Riera, la república es la única solución para "sacarnos de encima las lacras de España".

Presos y corrupción

Uno de los momentos más broncos del debate se ha producido cuando Rovira ha recriminado a Xavier García Albiol que Oriol Junqueras esté en la cárcel "mientras ustedes siguen sin saber quien es M.Rajoy, Bárcenas sigue esquiando y todos los corruptos están en libertad". Una aseveración que ha llevado a Albiol a recordarle que la prisión la decidió el juez Llarena "por saltarse la ley".

Arrimadas, que también ha sido blanco de estos ataques por el apoyo de C's al Gobierno del PP, ha recordado a ERC que "han gobernado con el 3% y la única condición que pusieron era la independencia".