Francia ha acercado a otros dos presos de ETA a cárceles cercanas al País Vasco con lo que son ya nueve los miembros de la banda que ha trasladado a las cárceles más cercanas a Euskadi. En este caso se da la circunstancia de que se trata de dos etarras condenados por su participación en atentados contra gendarmes franceses. Los terroristas acercados son Arkaitz Agirregabiria e Iurgi Garitagoitia, que han sido ingresados en la prisión de Lannemezan. El nuevo paso se produce sólo dos días antes de que en la localidad francesa de Bayona se conmemore este domingo el primer aniversario del acto de desarme de ETA celebrado en este municipio del sur de Francia y en el que está prevista la inauguración de una polémica escultura, que reproduce un hacha invertida, que rememora al anagrama de ETA, de cuyo mango de madera brota un árbol. El citado monumento ha provocado el rechazo de varias asociaciones de víctimas.

Arkaitz Agirregabiria, detenido en mato de 2015, fue condenado a 25 años de prisión por estar relacionado con el asesinato del gendarme francés, Jean Serge Nerin, última víctima mortal de la banda terrorista y que falleció durante un tiroteo con miembros de ETA ocurrido el 16 de marzo de 2010. Agirregabiria cumplía condena en la prisión de Fresnes, a 930 kilómetros de la frontera de Biriatou con el País Vasco mientras que el centro carcelario de Lannemezan se encuentra a sólo 230 kilómetros. A este preso de ETA se le acusó de ser responsable del aparato de adiestramiento de ETA.

El otro de los presos trasladados, Iurgi Garitagoitia, fue detenido en julio 2000 en la localidad francesa de Pau y cumple condena por herir gravemente a un gendarme en junio de ese año. Desde entonces cumple una condena de 15 años de prisión. Sobre él pesa además la acusación de haber coordinado el comando que cometió el asesinato del concejal del PSE en Mondragón, Isaías Carrasco y el empresario, Inaxio Uria.

El Ejecutivo francés procedió el pasado mes de febrero al traslado de los reclusos Zigor Garro y Julen Mendizabal a la prisión de Mont de Marsan, aplicando así su anuncio de acercamiento de aquellos reclusos que lo pidieran de forma individualizada y que, además, se encontrasen en el tramo final de su condena y sin delitos de sangre, entre otros requisitos.

Posteriormente, el pasado 9 de marzo las autoridades penitenciarias francesas trasladaron a los presos de ETA Josu Urbieta, Raúl Aduna y Jon Salaberria a la misma prisión. Además, en el mismo mes de marzo también se trasladó a Jon Gurutze Maiza y Alberto Ilundain a la cárcel de Lannemezan.