El rey Felipe VI ha pronunciado su discurso después del de Ana Pastor, presidenta del Congreso. El monarca ha querido expresar su compromiso con la Constitución y ha recordado que este no sólo constituye una exigencia sino una expresión de su lealtad al pueblo español.

"Este aniversario es una gran oportunidad para reconocer la dimensión histórica de la decisión tomada por los españoles el 6 de diciembre de 1978", ha continuado. Y ha querido dar las gracias a los padres de la Constitución, que se encontraban junto a los reyes eméritos en el centro del hemiciclo. "Con todos ellos y tantos hombres y mujeres que junto a ellos debatieron y acordaron, España tiene contraída su más alta deuda".

Para el monarca "la Constitución es un acto de coraje. Es la primera fruto del acuerdo y no de la imposición". También ha querido hacer mención al golpe de Estado del 23F, asegurando que unió aún más a los españoles e hizo más fuerte la democracia. "España no dejó pasar el tren de la Historia. Nuestra constitución es la culminación de un proceso que supone el mayor éxito político", ha añadido.

Se reconocían y se aceptaban en un reencuentro lleno de emoción, perdón, y renuncia"

"Nunca podremos ni debemos olvidar a esos españoles de diferentes lugares, ideas y sentimientos, del interior y del exilio que, movidos por unos mismos ideales, empujados por la fuerza y la ilusión del pueblo, con complicidad y una inmensa generosidad, se reconocían y se aceptaban en un reencuentro lleno de emoción, perdón, y renuncia", ha asegurado Felipe VI en alusión a todos aquellos que hicieron posible la carta magna.

Además, ha afirmado que tras estos 40 años ya se puede decir que "España ha vivido, sin duda, el cambio político, territorial, internacional, económico y social más profundo y más radical de su historia".

No ha dejado pasar la ocasión para hablar de la necesidad de ese "espíritu integrador de la sociedad española". "Una vocación integradora que no supone uniformidad, ni significa olvidar o suprimir la diversidad territorial, ni negar la pluralidad, sino asumir y reconocer a todas ellas en una realidad nacional común en la que caben diferentes modos de pensar, de comprender y de sentir. Una España, en fin, que es de todos, construida por todos, y sentida y compartida por todos. Una voluntad de resolver los conflictos y las discrepancias a través del diálogo, respetando las leyes y los derechos de los demás, sin imposiciones ni exclusiones".

Felipe VI ha querido terminar su discurso asegurando que ha puesto su vida al servicio de todos los españoles. "Desde la independencia y la neutralidad, y comprometido con la Constitución que nos trajo la democracia y la libertad. Porque la Corona está ya indisolublemente unida −en la vida de España− a la democracia y a la libertad", ha sentenciado.

40 años de la Constitución

Los 40 años de la Constitución han reunido a los Reyes, Don Felipe y Doña Letizia, y a los eméritos, Don Juan Carlos y Doña Sofía. También a los cuatro expresidente del Gobierno y a los padres de la Constitución. Además, de a los representantes del Gobierno, del Poder Judicial y de distintas instituciones con motivo del acto central por el cuadragésimo aniversario de la Carta Magna de 1978.

A esta ceremonia, celebrada en el Congreso, ha acudido los líderes de los principales partidos nacionales. Pablo Casado, del PP, Albert Rivera, de Ciudadanos, y Pablo Iglesias, de Podemos. Ha destacado la presencia de Alberto Garzón, coordinador general de IU, que llevaba siete años sin acudir a este acto en protesta por la reforma del artículo 135 de la Carta Magna.

Juan Carlos I, en el centro del Congreso

Para el Rey emérito, que fue precisamente quien firmó la Constitución aprobada en referéndum el 6 de diciembre de 1978, se ha reservado la parte central del hemiciclo, donde trabajan las taquígrafas, una zona en la que también se han ubicado a los 'padres' de la Constitución y los expresidentes del Gobierno Felipe González, José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy.

Es la primera vez que los dos Reyes, el actual y el emérito, coinciden en un acto oficial en el Congreso, ya que para el cuarenta aniversario de las elecciones democráticas de junio de 1977 no estuvo presente Don Juan Carlos. Aquella situación, que se justificó en el protocolo del formato elegido para el acto, generó extrañeza en los propios partidos políticos.

El retorno del Rey Juan Carlos al Congreso -es también la primera vez que coinciden las tres generaciones de la Familia Real en la Cámara- pone el broche a una semana de conmemoraciones en las que él ha tenido un papel protagonista.

Este lunes participó junto a Felipe VI en una audiencia conjunta al Consejo Asesor de las Cortes que ha preparado los actos conmemorativos y el martes inauguró una exposición junto a la Reina Sofía. Este jueves, tras los discursos, los presidentes del Congreso y del Senado ofrecerán una recepción a todos los asistentes en el Salón de Pasos Perdidos, que habitualmente recoge la ceremonia anual de los aniversarios de la Carta Magna.

En los habituales 'corrillos' de políticos con periodistas que sucederán al acto institucional sobrevolarán, entre otros asuntos, la reflexión del presidente Sánchez sobre la posibilidad de eliminar la inviolabilidad del Rey o la irrupción de Vox en el Parlamento andaluz tras las elecciones del pasado domingo.