El PP vasco no quiere tener nada que ver con Vox. Marcó la línea Alfonso Alonso el pasado 9 de Enero: "A Vox le falta un hervor". Diez días más tarde, acusó a la formación de Santiago Abascal de querer "medrar" a costa del Partido Popular. Ese guion lo ha seguido este fin de semana José María Cano, candidato popular a las próximas elecciones de la Diputación Foral de Gipuzkoa, con un grado más: equipara pactar con Vox con hacerlo con EH Bildu.

"A Dios gracias, en este territorio no va a ser necesario que ni tan siquiera me plantee un pacto con Vox", dijo Cano en una entrevista con el diario Noticias de Gipuzkoa, en la que dejaba claro que "no comparte" el acuerdo alcanzado en Andalucía para llevar a Juanma Moreno a la presidencia de la Junta de Andalucía.

En su argumentación, Cano ahonda en el distanciamiento respecto a la formación de Abascal: "No tengo nada que me una con Vox, aunque en uno o dos temas de gestión pueda coincidir, como puedo coincidir con EH Bildu". Una equiparación que ha generado rechazo en históricos del PP vasco como Carlos Urquijo -delegado del Gobierno en el País Vasco entre 2012 y 2016-, que le ha respondido desde los micrófonos de EsRadio: "No lo comprendo, me sorprende y me desagrada. No voy a decir que esté más próximo a Vox que a Bildu, es que con Bildu no tengo nada que ver y con Vox tengo mucho que ver".

En la línea de Borja Sémper

En la entrevista, Cano asegura además que no buscaría un pacto con Vox en Gipuzkoa si los números se diesen, y que priorizaría la negociación con "otros partidos". En cualquier caso, el diputado descarta que el partido verde llegue a ser un actor político relevante en el País Vasco, donde lo equipara con Ciudadanos por su posición contraria a las diputaciones, al concierto económico y, más allá, al propio Estado de las Autonomías. "No sé cómo sentará en Murcia, pero tengo el total convencimiento de que en Gipuzkoa no tiene venta", dice el diputado popular en referencia a ese discurso.

La posición de Juan Carlos Cano está en línea, también, con la del presidente del PP guipuzcoano, Borja Sémper, cuya voz fue una de las más críticas contra el acuerdo con Vox durante la negociación postelectoral en Andalucía. Sémper fue duro con el discurso de Vox contra la Ley de Violencia de Género y manifestó que "no merece la pena" llegar a acuerdos con el partido de Abascal si están supeditados a la derogación del texto.

"El PP debe buscar el entendimiento con otras formaciones con las que comparte esos principios y debe tener claro que debe alejarse de ese partido populista. Somos diferentes", dijo el dirigente regional del Partido Popular a principios de enero, antes de formalizarse el pacto que llevaría a Juanma Moreno a la presidencia de Andalucía.

Actualmente, el Partido Popular cuenta con un único juntero en la Diputación, controlada por el PNV (18) y el PSE (9), con EH Bildu (17), Podemos (6) y el PP en la oposición.