Ni al gimnasio ni a la piscina del hotel. Las periodistas que cubren la Supercopa de España que se celebra desde este miércoles en Arabia Saudí no podrá entrar a estos espacios por las restricciones que el país árabe impone sobre las mujeres. “Me llevo ropa de distinto tipo para evitar cualquier situación incómoda”, reconocía a El Partidazo de Cope la reportera Helena Condis. 

No solo la designación de Arabia Saudí como sede del torneo de fútbol fue polémica, también las declaraciones de Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), para justificar dicha decisión: “Es la Supercopa de la igualdad”. No es la primera que se celebra fuera de España -Marruecos acogió la final de la edición pasada- pero sí en la que participan cuatro equipos enfrentándose en unas semifinales, que se jugarán este miércoles y jueves.

“En el contrato consta que las mujeres tendrán las mismas posibilidades de acceso a los partidos que los hombres, y además obligamos a la creación de varias competiciones femeninas allí. Todo eso ha sido posible gracias a nuestra aportación. ¿Le damos la espalda a los hombres y mujeres de Arabia Saudí? Ese país ha lanzado un programa para fomentar la igualdad entre hombres y mujeres y vamos a apoyar a ese programa", defendió Rubiales.

El polémico trato de este país hacia las mujeres ha vuelto al punto de mira con la celebración del torneo. El qué puede o no vestir es un dilema al que se ha enfrentado estos días Helena Condis. La periodista de la Cope tuvo que informarse antes de hacer su maleta: "He metido en la maleta ropa ancha, que no dibuje la silueta, que tape los tobillos, que no deje el hombro al descubierto y, evidentemente, que no lleve ningún tipo de escote".

Las mujeres están obligadas a llevar 'abaya' pero no velo, algo que podría generar situaciones de "tensión" en algunos entornos

Según explicó, fue su compañera Mónica Marchante, enviada también al país saudí para cubrir el evento, la que le advirtió sobre los límites que se encontraría en el hotel en Yeda, la segunda ciudad más grande del país. Las mujeres no pueden entrar en la piscina ni en el gimnasio del hotel. "Sí quiero hacer algún ejercicio tendré que quedarme en la habitación y con YouTube ya haré algunos", explicaba.

Pero... ¿Qué se les prohíbe a las mujeres en Arabia Saudí? A pesar de que el polémico príncipe heredero Mohamed bin Salman intenta ofrecer una mejor imagen al exterior, las restricciones sobre las mujeres saudíes continúan palpándose en el reino de la península Arábiga. Desde 2018 se las permite conducir y desde el año pasado registrar a sus hijos o informar de la muerte de un pariente, algo que solo se les toleraba hasta entonces a los hombres, según informa Efe. También vieron nacer en 2019 la primera liga oficial de fútbol femenino, pero ni se retransmitió por televisión ni se permitió a los hombres acceder al estadio.

El mismo Ministerio de Exteriores español ofrece una serie de recomendaciones para los ciudadanos que viajen a Arabia Saudí. Las mujeres están obligadas a llevar en público la 'abaya', una túnica alargada y oscura que visten encima de la ropa. Es habitual, sin embargo, ver a mujeres sin velo aunque puede generar "confrontación" y "tensión" sí no se viste en determinados entornos.

La estricta separación de sexos que rige entre los saudíes obliga a que un hombre no pueda encontrarse con una mujer en un espacio público o privado salvo si guardan un vínculo familiar. De hecho, la mujer solo puede estar acompañada de un varón que sea su 'mahram', es decir, marido, hermano, padre o hijo. Cuentan hasta con una policía religiosa, la 'Mutawa', que vela por el cumplimiento de las costumbres islámicas.