El lehendakari Iñigo Urkullu, acompañado de su consejera de Salud, Nekane Murga, y del director general de Osakidetza, Juan Diego, ha sido recibido hoy con gritos de "¡fuera, fuera!", "¡más refuerzos, más plantilla! y "¡menos imagen, más calidad!" durante una visita que ha realizado al Hospital de Cruces en Barakaldo.

Durante el recorrido que ha llevado a cabo para conocer el modo en el que el principal centro hospitalario del País Vasco está abordando la pandemia, Urkullu ha sido recibido desde su llegada por un grupo de trabajadores sanitartios que portaban pancartas en protesta por el modo en el que han tenido que hacer frente a la epidemia durante los últimos meses. La protesta había sido promovida por distintas centrales sindicales de la sanidad vasca como ELA, LAB, Esk, UGT y CCOO. Los manifestantes han seguido a la comitiva gubernamental, a la que acompañaba un equipo de seguridad, por parte de las instalaciones del recinto médico.

La protesta se produce en la primera jornada en la que Euskadi activa la fase I de la pandemia, si bien lo hace con unas restricciones mayores al haber limitado el Gobierno vasco aspectos como la movilidad o el derecho de poder celebrar encuentros entre personas que sí plantea la Fase I ideada por el Gobierno central. El Ejecutivo vasco ha evitado hacer referencia a estas protestas y sólo ha informado de las apelaciones hechas por el lehendakari durante su visita para que la población vasca mantenga la "máxima prudencia y rigor" en la nueva fase iniciada hoy para evitar un rebrote de los contagios. Durante la misma ha agradecido a los responsables del hospital el esfuerzo realizado por todos los trabajadores sanitarios en la batalla contra el Covid-19.

La falta de medios para hacer frente a pandemia ha sido denunciada de manera reiterada por distintos colectivos sanitarios en Euskadi. La ausencia de suficientes equipos de protección EPI o los casos de retirada de mascarillas defectuosas por las que se infectaron muchos sanitarios se han repetido en las últimas semanas. También el número de sanitarios infectados en el País Vasco ha sido superior al de otras comunidades autónomas. Actualmente en la sanidad vasca se ha logrado contener de modo imortante el coronavirus, con apenas 11 infectados antre ayer y hoy y cinco nuevos fallecidos en las últimas 24 horas.