La epidemia no tiene fronteras y nos rebrotes tampoco. La máxima que los expertos y políticos han repetido una y otra vez en los últimos meses como un mantra se ha repetido entre Euskadi y Cataluña. El nuevo brote detectado hace doce días en la localidad guipuzcoana de Ordizia suma ya 30 infectados por Covid-19 y se sospecha que el origen del foco se encuentra en uno de los infectados que vino de Lleida a una celebración familiar en la localidad y que habría sido el origen de la proliferación de casos.

Precisamente la Generalitat de Cataluña ha decretado el retorno al confinamiento en la comarca del Segriá, área que engloba a 38 localidades y una población de casi 200.000 personas, tras detectar un incremento de casos y haber localizado al menos 14 rebrotes. De este modo, durante los próximos 15 días no podrán abandonar los municipios ni celebrar concentraciones de más 10 personas. Ahora el Ejecutivo de Iñigo Urkullu sospecha que el foco aparecido en Ordizia podría estar relacionado con una personas procedente de Lleida y que visitó Ordizia con motivo de una comida familiar celebrada en uno de los restaurantes afectados.

El Gobierno vasco ha informado hoy que continuará realizando pruebas PCR en Ordizia, donde ayer instaló varias carpas para que todas las personas que hubieran frecuentado la calle Etxezarreta, donde se concentran gran parte de los bares y restaurantes, después del 27 de junio pasado se sometan a pruebas. Por el momento se han sometido a los test PCR más de un millar de personas. De entre todas ellas se conoce ya el resultado de 795 test que han confirmado la treintena de casos de infección por coronavirus.

"Actuar con firmeza"

Según ha informado la consejera de Salud del Gobierno vasco, entre los infectados también se han confirmado algunos casos de personas que procedían de fuera de Ordizia, como San Sebastián o incluso procedentes de Vizcaya y Alava.

Murga ha reiterado su llamamiento a todas las personas que hubieran frecuentado esta zona para que se sometan a pruebas y ha urgido a quienes presenten síntomas compatibles con Covid-19 a que se aíslen y se pongan en contacto con el Servicio Vasco de Salud.

La consejera ha advertido de que si la situación empeora "no dudaremos en actuar con firmeza": "Nos estamos jugando la salud. Lo sucedido en Ordizia puede ocurrir en cualquier municipio de Euskadi". La situación ha llevado a constituir una comisión de seguimiento entre la consejería y los ayuntamientos del entorno para analizar la situación y adoptar decisiones más estrictas si fuera necesario. Por el momento el Ayuntamiento de Ordizia ha cerrado los edificios públicos, los parques públicos y ha suspendido la feria prevista para mañana.

La preocupación por este caso ha sido evidente en el seno del Ejecutivo que a última hora de la tarde del domingo emitió una alerta sanitaria dirigida a los vecinos de Ordizia urgiéndoles a someterse a pruebas Covid-19 si hubieran alternad en la zona donde se detectó el origen del brote.

El incremento de casos se produce a sólo unos días de que el País Vasco celebre elecciones autonómicas este domingo. Precisamente los comicios se celebrarán con un estricto protocolo de seguridad y prevención por el riesgo de contagios. Todos los colegios electorales se habilitarán de modo especial, y se instalarán más puntos de votación para reducir el riesgo de contagio.