El Ministerio de Defensa y el Ejército de Argentina han confirmado este viernes el hallazgo del submarino ARA San Juan, desaparecido el 15 de noviembre de 2017 con 44 tripulantes a bordo. La institución ha explicado que la nave sufrió una "implosión cerca del fondo", pero reconoce las dificultades para reflotarlo.

"El Ministerio de Defensa y la Armada Argentina informan que en el día de la fecha, habiéndose investigado el punto de interés número 24 informado por Ocean Infinity, mediante la observación realizada con un ROV a 800 metros de profundidad, se ha dado identificación positiva al ARA San Juan", ha comunicado la empresa Ocean Infinity, que se encargaba de la búsqueda del submarino, a través de su cuenta en la red social Twitter.

El ministro de Defensa, Oscar Aguad, y autoridades de la Armada Argentina certificaron que el hallazgo, realizado por la compañía Ocean Infinity, se produjo a 907 metros de profundidad en el Atlántico, tras un año y dos días de su desaparición.

El ex portavoz de la Armada y actual agregado naval en Estados Unidos, capitán Enrique Balbi, señaló que el informe entregado por la compañía Ocean Infinity "sugiere que podría haber implosionado, colapsado muy cerca del fondo, porque el desprendimiento de escombros es muy acotado" en el área donde fue hallado.

“No tenemos medios para rescatarlo. No los teníamos para bajar a las profundidades del mar”, señala el ministro de Defensa argentina

Tras ser consultado por la prensa argentina si la Armada cuenta con los medios para poder recuperar los restos del Ara San Juan del lecho marino, el vicealmirante Jose Luis Villán se mantuvo prudente. “Hay dos limites que exceden nuestro conocimiento. El primero es legal, la jueza tiene que decir cuándo se pueden remover las dos partes del submarino halladas. El segundo es el límite de la técnica. No podemos afirmar o negar que lo podemos sacar”, recoge el diario Clarín. 

Sin embargo, el ministro de Defensa, Oscar Aguad, reconoció que el país no cuenta con los recursos suficientes para reflotar el submarino a la superficie. “No tenemos medios para rescatarlo. No los teníamos ni siquiera para bajar a las profundidades del mar”, explicó.

El ministro también aclaró las dudas sobre por qué no concentraron todos los operativos en el área donde desde el primer momento se había establecido la “falla hidroacústica”.

Búsqueda incierta

“Ese punto se especificó luego de tener la información de la CTBTO (la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares) sobre la explosión que había expulsado el ruido o la anomalía acústica en censores mundiales. A partir de ahí cambió el rumbo de la búsqueda. Todos los barcos se concentraron en esa zona por el rumbo que llevaba el submarino. No había casi ninguna duda de que era el lugar donde se había producido esta tragedia. Estaban todas las armadas del mundo buscándolo con tecnología de altísima definición”, afirmó, según recoge Clarín. 

“Pasaron todos los barcos por esa zona y nunca lo pudieron detectar. Siempre dijimos que no es fácil encontrar un submarino y menos en las profundidades donde lo hemos encontrado. La empresa tenía libertad para buscar. Muchos familiares sostenían que no era la zona adecuada donde estábamos buscando. Les dimos toda la información y libertad. El barco fue a buscar un punto donde se decía que habían escuchado ruidos de cascos. Ahí no se encontró nada”, detalló Aguad.

Preguntado sobre si creía que hubo mala praxis al momento del siniestro, señaló que "es muy difícil saber". "Pasó muy poco tiempo entre la última comunicación y la anomalía acústica de la implosión. Nada pudieron hacer los tripulantes, lo que hace suponer que fue una cosa de imprevisto. Espero que la investigación nos aproxime un poco a saber lo qué pasó", añadió.

El ministro aclaró que planea reunirse en los próximos días con los familiares de los tripulantes y que se decretará el duelo nacional.

Por su parte, Villán apuntó que “los próximos pasos son tener toda la información de la empresa que estuvo buscando el submarino. Ellos por contrato nos tienen que entregar toda la información de las áreas que han rastreado y nos pondremos a estudiar y ver qué hacer. Muchas de las decisiones las tiene que tomar la Justicia”.

La localización del submarino fue realizada por el buque Seabed Constructor, que desde el 6 de septiembre estaba al frente de las operaciones de búsqueda en la zona en la que el submarino perdió contacto, aproximadamente a 250 millas náuticas (460 kilómetros) al este del Golfo chubutense de San Jorge