Mila Ximénez ha reaparecido este martes en Sálvame tras permanecer varias semanas alejada del programa. Los espectadores comenzaban a preguntarse dónde y sobre todo cómo estaba la colaboradora que meses atrás anunciaba que padecía cáncer. Ximénez ha explicado que ha estado "un mes en la cama" sin moverse. "Tenía ganas de volver. Sé que la gente ha estado preocupada y yo también", ha confesado.

Asimismo, la comunicadora ha advertido de que "se ha complicado una de las zonas" y tienen que hacerle un TAC. "Dependiendo de eso, tomaré una decisión. Escucharé a mi doctora y decidiré", ha indicado. "Todo se decide en dos semanas... Pero no tengo miedo. O continúo o tomo la decisión de que yo no quiero seguir viviendo así. Lo que me ha pasado este mes no es vida. Yo tengo mucha fuerza, pero cada vez me cuesta más sacarla y levantarme", explicaba.

"Está siendo muy largo el camino y muy jodido, pero ahí estamos. A mí me gusta vivir, pero me gusta vivir con calidad de vida. Lo tengo dicho. Si me dicen que esto dura un tiempo, pues yo me organizo. No sé lo que haría, pero sé que estoy preparada". Ante esta hipotética situación ha indicado que "si me dicen que esto va para larguísimo y que no saben si va a funcionar, se acabó el tratamiento. Lo que dure. Me voy de viaje, me cojo una casa en el campo, pero yo no voy a continuar", ha asegurado. "Es una reflexión que me hago todos los días".

Por último, Mila Ximénez ha explicado cuál era su miedo de volver a la tele. "No me puedo peinar porque me han cambiado la quimio. Tengo miedo de que la gente me vea enferma, no sabía como se me iba a ver el pelo y me da miedo desmayarme o que me tenga que ir al baño corriendo", aseguraba.