Todo empezó el año pasado, cuando Pedro Sánchez se tomó cinco jornadas de reflexión para meditar acerca de si merecía la pena que continuara al frente de la presidencia del Gobierno, vista la fiereza de los ataques que recibían a diario él y su familia. Su decisión fue la de permanecer, pero con la vocación de limpiar el debate público de determinadas impurezas que emanan de los medios de comunicación que desinforman. De ahí surgió su Plan de Acción por la Democracia; y, de ahí, la renovación del organigrama de Radiotelevisión Española.

Este plan lo avanzó el ministro Óscar López en una rueda de prensa el pasado octubre, en la que anunció que la corporación contaría a partir de ahora con "el Consejo más plural de su historia". Unos días después, se convalidó el real decreto ley que permitió esos nombramientos. El PP y Vox pidieron que se suspendiera la votación dado que una dana acababa de descargar sobre Valencia.

Los 15 vocales de la nueva RTVE fueron elegidos por los partidos a partir de criterios políticos, de filias y de fobias. El PSOE propuso como presidente a José Pablo López, quien había sido despedido como director de contenidos en marzo de 2024 tras protagonizar un fuerte enfrentamiento con quien entonces encabezaba la corporación, Elena Sánchez.

López fue quien encabezó "la Telemadrid del cambio". La Asamblea autonómica le designó con una amplia mayoría y emprendió un cambio en su parrilla de programación que mejoró sensiblemente la audiencia de la cadena. Tras la dimisión de Cristina Cifuentes y la llegada de Isabel Díaz Ayuso a Sol, se inició un enfrentamiento entre las partes que culminó con su cese, en 2021. López y su equipo denunciaron fuertes presiones políticas que incluyeron el estrangulamiento económico de Telemadrid, dijeron. Tras su salida como director general, presentó una denuncia que perdió hace un año en los tribunales.

"La casa de todos"

Hace una semana, RTVE organizó una fiesta con motivo de la presentación de La familia de la tele, es decir, del programa que llevará a la parrilla de programación de La 1 a María Patiño, Chelo García Cortes, Belén Esteban y compañía. Esta última ha pronunciado en algunas de sus últimas apariciones públicas una frase que podría considerarse como un eslogan, en la que se refiere a esta empresa pública como "la casa de todos".

La productora será La Osa Producciones Audiovisuales, que es la sociedad que establecieron los socios de La Fábrica de la Tele, hasta ahora, organizados en la empresa Fabricantes Studio. De ahí reclutó José Pablo López el pasado diciembre a Sergio Calderón, el director de programación de TVE. Poco después, sus socios eran premiados con un contrato de 5,3 millones de euros para reeditar Sálvame en La 1; y con la coproducción de Malas Lenguas, el espacio que presenta Jesús Cintora y que co-produce una filial de Mediapro (Big Bang Media). Su presupuesto es de 2 millones de euros.

La corporación había prescindido de Cintora en el verano de 2021. La decisión fue la primera que enfrentó a los vocales de aquel Consejo de Administración, nombrado en marzo de ese año tras el acuerdo alcanzado por PSOE, PP, Podemos y PNV para repartirse los asientos de ese órgano. Tras el despido del presentador, el sindicato Comisiones Obreras atribuyó a las presiones del PP y de Atresmedia su destitución.

Uno de los antiguos consejeros de Podemos, José Manuel Martín Medem, reconoció en su día a este periódico que había pedido a José Pablo López -cuando era director de contenidos- la vuelta de Cintora. Esa opción nunca se consumó en esa etapa. Su regreso se ha producido tan sólo unos meses después de que López aterrizara en el despacho principal de Prado del Rey. Su programa se presenta como un antídoto contra los bulos y la desinformación, pero tiene una clara línea editorial, que tiende a presentar los asuntos de actualidad desde un enfoque de izquierda.

El otro consejero que denunció el despido de Cintora fue Roberto Lakidain, quien hoy es director de Desarrollo Corporativo y Servicio Público de RTVE. Procede de CCOO, al igual que Mayte Martín del Caz, consejera designada por Sumar y antigua líder de ese sindicato en la corporación.

Subcontratar magacines

RTVE invirtió en 2024 alrededor de 500 millones de euros en mantener a su plantilla, conformada por unas 7.000 personas. Llama la atención, en este sentido, que externalice la realización de magacines de info-entretenimiento, como Malas lenguas. Sus sindicatos lo han denunciado en otras etapas e incluso varios de ellos —salvo CCOO— llegaron a denunciar ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia el anterior programa que presentó Cintora, producido por LACOproductora (José Miguel Contreras entonces), al considerar que era ilegal la externalización de un formato informativo. Su acción no llegó a ninguna parte.

La corporación ha recurrido también a Javier Ruiz para su programa Mañaneros, coproducido por La Cometa TV y el cual se emite tras La hora de La 1, de Silvia Intxaurrondo y Marc Sala.

RTVE quiere que su segundo magacín de la mañana tenga una mayor carga política, de ahí que recurra a Javier Ruiz, quien iba a ser uno de los rostros de referencia en la televisión que se cocinaba dentro del Grupo Prisa, pero que nunca llegó a nacer. El último paso del jefe de Economía de la SER por la corporación sucedió en 2022. Le dieron un debate que se llamaba Las claves del siglo XXI. Se emitía en el prime time de los viernes y fue retirado tras registrar una audiencia media de 579.000 espectadores y el 4,7% del share.

José Pablo López introducirá una mayor carga política en esa franja de la parrilla de programación, lo que convertirá a Ruiz, de nuevo, en competidor de Antonio García Ferreras (La Sexta), con quien, por cierto, Moncloa siempre ha tenido sus reservas, dado que, en 2016, apoyó a Susana Díaz en su batalla conta Pedro Sánchez por el control del partido.

Las abogadas de Atocha

Mañaneros ha recibido dos contratos de 472.864 y 172.378 euros en lo que va de 2025. Otra de las apuestas con carga política de José Pablo López costará 177.586 euros. Se llama Las abogadas: la verdadera historia (RTVE Play). La presenta Inés Hernand e incluye en su reparto a Manuela Carmena, Paca Sauquillo y Cristina Almeida.

Según adelantó Vertele, Hernand "viajará con ellas a la España que se escandalizaba por las suecas en biquini y, juntos, tratarán de entender cómo Donald Trump y Elon Musk están cambiando el mundo". Entre los testimonios que se escucharán se encuentra el de Bob Pop, el de Valeria Racu -portavoz del Sindicato de Inquilinas- y la cantante Rozalén.

Otra de las novedades de esta nueva etapa es la aparición periódica, en la primera cadena, de Late Xou, un programa que surgió en 2023 dentro del Centro Territorial de Cataluña y que realiza Minuto de Barras, de Santi Vilas y de su propio presentador, Marc Giró. Su contrato asciende a 579.712 euros.

El humor

Los monólogos de Giró han sido objeto de debate en las redes sociales en las últimas semanas debido a que incluyen cierta carga política, que gusta o disgusta según quién los escuche. Tampoco están libres de ello los de Henar Álvarez, que presenta otro espacio humorístico producido por El Barrio (Jordi Évole) que se llama Al cielo con ella y que tiene un presupuesto de 499.306 euros.

Está por ver si la totalidad de estas nuevas apuestas de la corporación enganchan a la audiencia. Lo que parece evidente es que José Pablo López ha incrementado la carga política de su programación; algo que coincide con el espíritu con el que José Miguel Contreras y compañía concibieron su proyecto fallido de cadena en Prisa.

López puede presumir de éxitos de audiencia como el de La revuelta, de David Broncano, como también de una sustancial mejora de la audiencia (+1,1 puntos en marzo) que, sin embargo, no evitó el sorpasso de Telecinco en marzo y que, a mitad de abril, le mantiene todavía en tercera posición.

Nunca antes, desde que RTVE es corporación (2007), un presidente ha aglutinado tanto poder. El real decreto ley ratificado en octubre por el Parlamento le otorga poder de decisión sobre los nombramientos de los directivos y sobre los contratos audiovisuales.

En sus comparecencias parlamentarias, ha defendido hasta ahora su proyecto — incluso puntos polémicos para la oposición, como incrementar la programación en catalán en La 2 en esa región— y una idea que apunta a que la corporación no puede ser elitista y debe apostar por el entretenimiento.

Pocas horas después de su llegada, envió una carta a sus trabajadores que incluía una cita de Carlos Ruiz Zafón que llamó la atención a los lectores más avispados. Sobre todo, ante las circunstancias que rodearon su despido en 2024. Decía: "La vida es la hipoteca del alma: aunque uno salga con buenas intenciones, ir avanzando implica cometer traiciones, con los demás o con uno. Hay quien tiene la fortuna de no caer demasiado en ello y quien directamente es un hijo de puta, pero el dilema sobre si hacemos o no lo correcto lo tenemos todos". "Espero ser de los afortunados".