La Ertzaintza ha abierto diligencias por un presunto delito contra la fauna protegida al localizar en el puerto vizcaíno de Bermeo varias bolsas con carne de delfín, cuya pesca no está permitida, y que fueron arrojadas al agua por la tripulación de un pesquero al verse descubierta.

Los buzos de la Unidad de Vigilancia y Rescate de la Ertzaintza recuperaron del fondo del puerto de Bermeo tres bolsas con carne de delfín, según ha informado este jueves el departamento vasco de Seguridad.

Los hechos se produjeron en la tarde de ayer miércoles cuando dos inspectoras del Servicio de Pesca Marítima, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación del Gobierno central, realizaron una inspección a un barco pesquero que acababa de atracar en el puerto de Bermeo.

El barco solo tenía autorización para la pesca de verdel y congrio, pero las inspectoras localizaron en las bodegas de la embarcación varias bolsas que contenían trozos de carne de delfín, especie de fauna protegida cuya pesca es ilegal.

Al verse sorprendida, la tripulación del pesquero lanzó las bolsas al mar. Ante ello, las inspectoras solicitaron la colaboración de la Ertzaintza para tratar de recuperarlas.

Agentes de la Sección Central de Medio Ambiente y Urbanismo de Investigación Criminal y Policía Judicial y de la Ertzaintza hicieron una inspección ocular del barco, mientras buzos de la Policía vasca comenzaron a rastrear las aguas del puerto.

Después de una intensa búsqueda, dificultada por la escasa visibilidad del agua, los buzos consiguieron extraer del fondo marino tres bolsas que contenían numerosos trozos de carne cuya apariencia, según las inspectoras del Ministerio, era plenamente compatible con delfín.

Por ello, los agentes instruyeron diligencias por un presunto delito contra la fauna protegida. Las evidencias ocupadas se remitirán para su estudio al Centro de Investigación en Biología y Biotecnología Marinas Experimentales de la UPV/EHU, que se dedica a la investigación científica y tecnológica