El futbolista José Antonio Reyes ha fallecido este sábado tras sufrir un accidente de tráfico, ha informado a través de Twitter el Sevilla, equipo en el que se formó y obtuvo sus primeros éxitos.

Reyes, que actualmente militaba en las filas del Extremadura en Segunda División, ha sufrido el fatal accidente este sábado por la mañana cuando conducía en la autovía entre Utrera -su localidad natal- y Sevilla. Junto a él ha fallecido un primo que también viajaba en el vehículo. Un tercer ocupante permanece ingresado en estado muy grave.

José Antonio Reyes, que ha fallecido con 35 años de edad, fue el jugador más joven en debutar en Primera División con el Sevilla, a los 16 años, en la temporada 1999-2000.

Rápidamente se convirtió en un emblema del club nervionense e impactó con su marcha al Arsenal en el verano de 2003. Fue un pionero -pocos futbolistas españoles habían emprendido su camino- y un símbolo de un fútbol ajeno a la galaxia que se formaba en Madrid. En ese mercado de fichajes, mientras Florentino Pérez presentaba a David Beckham con su inolvidable traje azul cielo, Reyes se presentó ante Arsene Wenger con unos pantalones campana y una sudadera.

Con el equipo gunner jugó tres temporadas, ganó una Premier League y dos copas nacionales y llegó a una final de la Champions League que el Arsenal perdió frente al Barcelona.

Tras sufrir problemas de adaptación en el Reino Unido y perder protagonismo en el equipo, Reyes regresó a España en 2006 fichando por el Real Madrid. Una temporada en la que, a las órdenes de Fabio Capello, terminó siendo clave para que el Madrid levantara un título de Liga que parecía imposible a diez jornadas del final. Marcó dos goles en el decisivo encuentro final frente al Mallorca.

Tras dejar el Santiago Bernabéu Reyes recaló en el Atlético de Madrid, donde no fue especialmente bien recibido por su reciente experiencia madridista. No triunfó en su primer año y salió cedido al Benfica portugués. En su regreso a Madrid disputó otras tres temporadas en el Calderón, aunque su influencia fue declinando hasta prácticamente desaparecer en la temporada 2011-2012. En este período ganó dos Europa League y una Supercopa de Europa.

Reyes, que había sido internacional absoluto con España y uno de los mayores talentos del fútbol nacional, palidecía lejos de casa. Y no dudó cuando se le presentó la ocasión de regresar a Sevilla.

En Nervión disfrutó del fútbol durante cinco temporadas en las que ayudó a su club a conseguir tres títulos europeos. Revulsivo, líder, todavía explosivo, haciendo olvidar a la grada que de pequeño había cortado una tarta con la camiseta del Betis puesta. Cuando sus piernas dijeron basta decidió vivir su ocaso futbolístico en otros lugares.

Pasó por el Espanyol, por el Córdoba, e incluso probó suerte durante tres partidos en la Superliga China. Si Londres no funcionó, Urumchi funcionó menos. Este mismo año anunció su regreso a España para disputar con el Extremadura la segunda mitad del campeonato. Iba a ser el punto y final a su carrera deportiva.