Los agentes en prácticas que en julio se incorporen a las unidades de Ibiza y Formentera “tendrán que dormir en sus coches” debido a la “disparatada oferta” de alquiler que les impide encontrar alojamiento en las Pitiusas.

Así lo ha anunciado la Asociación española de Guardias Civiles (AEGC) ha advertido que en un comunicado. Según explica, con un “paupérrimo primer sueldo que apenas alcanza los 1.000 euros, los nuevos agentes en prácticas se están encontrando “auténticas dificultades” para hallar una vivienda en la que residir.

De hecho, apunta que este mismo sábado, una de las guardias civiles alumnas “ha sido víctima de una estafa” mediante un anuncio publicado en la página Idealista. Según detalla la asociación, tras acordar las condiciones y una vez abonados los 500 euros de señal, la supuesta arrendadora “ya no responde, pero sigue ofreciendo lo mismo a otros”. La agente interpondrá denuncia.

La AEGC recuerda que la problemática de la vivienda ya la sufren también, en mayor o menor medida, los guardias civiles y el resto funcionarios en todas las islas. Aun así, la situación en las Pitiusas es “aún más grave”, remarca.

Añade que la “falta de vivienda y la carestía de la vida” han hecho que este destino ya no sea deseado: “Nadie quiere venir, y muchos se quieren ir. Esto ha provocado que las plantillas se hayan reducido a niveles nunca vistos”, advierte.

También señala que la falta de pabellones, el “fallido intento” de crear un nuevo acuartelamiento en Sant Josep, y la “inacción” de la Administración, están causando “estragos” en los servicios públicos de las islas y en las “vidas de sus funcionarios y familias”.

Por ello, reclama al Gobierno que “fije su atención de una vez ante esta situación” ya que es “vital incrementar” la indemnización por residencia y facilitar el acceso a la vivienda a los “cada vez menos” guardias civiles que vienen a las islas.

Para la agrupación, las residencias militares de Ibiza podrían ser un espacio donde los guardias civiles en prácticas “pudieran alojarse”, al menos hasta que puedan encontrar una vivienda donde residir, “lo que se antoja difícil”. La asociación añade que “si se sigue mirando” para otro lado este verano guardias civiles en prácticas “tendrán que dormir en sus coches”.