Alejandro Sanz vuelve con Y, ¿si fuera ella?, el tema con el que abría hace ya 20 años su álbum Más, y lo hace a modo de homenaje. Para este aniversario ha querido contar con grandes nombres de la música en español y ha conseguido que Pablo Alborán, David Bisbal, Antonio Carmona, Manuel Carrasco, Jesse & Joy, Juanes, Pablo López, Malú, Vanesa Martín, India Martínez, Antonio Orozco, Niña Pastori, Laura Pausini, Abel Pintos, Rozalén, Shakira y Tommy Torres formen parte de este nuevo disco.

Todos los artistas que han decidido participar, y el propio Alejandro Sanz, ayudarán con la venta de este single con una donación a Save the Children, y que esta organización destinará a paliar el hambre en el Cuerno de África, por elección del cantante, según informan desde la ONG. Tanto el single como el videoclip fueron presentados el pasado 17 de mayo por el propio artista en una rueda de prensa en Madrid.

En cuanto al concierto -que agotó las 45.000 localidades tras 30 minutos a la venta-, Sanz ha señalado que será "único e irrepetible", si bien no ha querido dar demasiadas pistas de lo que se verá en el Vicente Calderón. Una de las novedades que sí ha visto la luz es la de una nueva versión de Y, ¿si fuera ella?, en la que hasta 17 voces de artistas reconocidos han participado en una canción cuyos derechos irán destinados íntegramente a Save The Children.

Juanes, Laura Pausini, Shakira, Antonio Orozco, Antonio Carmona, India Martínez, Malú, Vanesa Martín o David Bisbal son algunos de los nombres que participan en esta versión y sobre los que el cantante madrileño ha dejado entrever que participarán en el concierto del próximo 24 de junio, aunque sin confirmar si estarán todos.

Pese al homenaje al disco Más, Sanz ha defendido todos sus trabajos de los que "siempre se saca algo". Más vendió cerca de 2,2 millones de copias en España y más de 6 millones en todo el mundo y consiguió estar 67 semanas en el número uno de la lista de ventas, cifras que son "irrepetibles a día de hoy".

"Ese disco se parió redondo, estuve un año encerrado componiendo y mi madre me dejaba la comida en la puerta. Todavía hoy lo escucho y siempre hay cosas que me sorprenden musicalmente, que siguen estando vigentes. La gente hizo suyo ese disco y formó parte de su vida", ha explicado, tras matizar no obstante que no toda su carrera "dependió" de este álbum. "He trabajado muy duro durante muchos años".

Nueva regulación

Precisamente, uno de los cambios que ha notado respecto a la época en que sacó el disco -del año 1997- es el de la manera de consumir música, "a mucha velocidad" hoy en día, algo que "no es bueno". "La gente ahora no tiene mucha calma", ha lamentado, relacionando esto con la piratería.

"Ahora también tenemos el problema de la reventa, antes estaba a nivel de la calle, pero lo que me preocupa es que está llegando a las grandes plataformas. Esto beneficia a los dueños y perjudica a todos los demás, músicos y espectadores", ha concluido, después de reiterar la necesidad de una nueva regulación en este apartado que está en manos de "los técnicos del Ministerio de Justicia".