Las sagas de Tolkien siguen dando dinero, y mucho, a tres años del estreno de la última película del Hobbit: 80 millones de euros recibirán los herederos del escritor como compensación de la productora Warner Bros por utilizar sin permisos la marca del Señor de los anillos en los videojuegos online.

La disputa legal empezó en 2012, con una demanda de los herederos de Tolkien, encabezados por la hija Priscilla, y HarperCollins, editora de El Hobbit y El Señor de los anillos. Sostenían que Warner Bros sólo tenía licencia de utilización de la marca Tolkien para objetos ‘tangibles’, sin incluir el mercado digital ‘intangibles’ ni los juegos de apuestas. Es decir podían producir camisetas, dvd y muñecos, ecc., pero no apps o productos online. No es la primera que la saga de Tolkien acaba en los tribunales. En 2009 New Line Cinema, la productora que llevó los libros a la gran pantalla, desembolsó 100 millones de dólares para terminar el litigio sobre los beneficios obtenidos por las películas.

Esta vez el desacuerdo estaba sobre la utilización por parte de Warner Bross de la marca para publicitar juegos de apuestas como el Pinball del Señor de los anillos, que llegó incluso a introducirse en los casinos de Las Vegas. Una asociación que a los herederos resultó particularmente molesta. Las tragaperras online “dañan irreparablemente el legado de Tolkien”, expresaron en un comunicado. El escritor,  murió en 1973 a los 81 años.

De nada ha servido a Warner Bros sacar del cajón un contrato del 1969 y revalidado en 2010, que le otorgaría todos los derechos de explotación. En respuesta los abogados de los Tolkien aportaron el testimonio de las únicas dos personas supervivientes que asistieron a la firma del acuerdo. La batalla judicial ha durado hasta ahora, cuando se dio a conocer el acuerdo en el tribunal de Los Angeles. Ambas partes han confirmado la noticia sin precisar detalles.

La recaudación total en todo el mundo de las tres películas basadas en la trilogía de El Señor de los Anillos y las otras tres desarrolladas a partir de El Hobbit, todas ellas dirigidas por Peter Jackson, rondaron los 5.850 millones de dólares en los cines de todo el mundo.