Pablo Iglesias ha concedido este martes su primera entrevista tras la investidura de Pedro Sánchez. Lo ha hecho en El Intermedio, el programa del Gran Wyoming en LaSexta, que está coproducido por Globomedia, propiedad de Jaume Roures, su gran aliado mediático. El líder de Unidas Podemos ha exhibido un 'deje' oficialista que no ha sido muy habitual en su discurso desde que alcanzó el mainstream político.

Una de las cosas que más ha llamado la atención de su discurso ha sido su opinión sobre la monarquía. Es decir, sobre un sistema al que durante los últimos años ha deslegitimado por aquello de que impide a los ciudadanos pronunciarse sobre la figura del jefe de Estado, que hereda el puesto de su padre y, a su vez, lo cede a sus descendientes. Y así hasta el infinito.

Así como el PSOE pasó de republicano a 'juancarlista' y de ahí a 'felipista', sin renunciar al postureo del 14 de abril, Unidas Podemos ha modificado su discurso ante lo que Iglesias considera una evidencia, y es que no hay una mayoría social que apoye la abolición de la monarquía. “Soy republicano porque la república tiene más elementos de cohesión que la monarquía. (…) Ahora bien, no creo que en los próximos meses o años haya una realidad que permita a España convertirse en una república. Evidentemente, no soy ingenuo”, ha afirmado.

Y ha añadido: “Pero cada vez que el PP y Vox lanzan vivas al Rey y se comportan como estos días (de forma “maleducada”), están poniendo en dificultades a la monarquía (...). Juan Carlos I entendió desde el principio que la mejor estrategia era acercarse a la gente más alejada de la derecha”.

La cuestión catalana

El líder de la formación morada también ha maquillado con unas pinceladas de corrección su discurso con respecto a Cataluña y se ha mostrado partidario de que los ciudadanos de esta comunidad autónoma voten sobre el posible acuerdo que alcancen el Gobierno y los independentistas para tratar de solucionar el conflicto político catalán. Eso sí, ha incidido en que requerirá que ambas partes realicen concesiones. También ERC.

Iglesias urge a modificar el Código Penal para garantizar que en las relaciones sexuales “sólo sí es sí”

Con respecto a la posibilidad de que el referéndum sobre este asunto se celebre en toda España, ha sido tajante: “El Estatuto de Andalucía les tocaría votarlo a los andaluces; y el del País Vasco a los vascos. La Ley orgánica que regula las diferentes modalidades en las que se hace un referéndum habla de 'provincias afectadas'. El Estatut sólo se votó en Cataluña, igual que el resto de estatutos de autonomía”.

En otras palabras, si de esa negociación surge un nuevo Estatuto de autonomía, la ley faculta a que sólo los ciudadanos de esa región se pronuncien en las urnas sobre su contenido, según el próximo vicepresidente del Gobierno.

Marxismo de baja intensidad

El líder de la izquierda radical que hace un lustro defendía ideas económicas del catecismo marxista, apostaba por renegociar la deuda soberana y reconocía que vería con buenos ojos avanzar hacia la colectivización de los medios de producción, hoy afirma que ha alcanzado un pacto “moderado” con Pedro Sánchez para mejorar las políticas sociales sin alarmar a Bruselas.

También habla de subir los impuestos a las rentas más altas, pero con la mano izquierda que no aplicaba cuando no tenía opciones de formar parte del Gobierno. “Esta vez se van a ajustar el cinturón un poquito más los de arriba (…). Vamos a intentar hacer una política que ponga a la gente humilde en el centro y que haga que los que se esfuercen sean los que nunca se han esforzado. Durante la crisis, los millonarios han crecido y les ha ido mejor. Vamos a hacer los recortes por arriba”, ha expresado.

El líder de Unidas Podemos se ha pronunciado durante la entrevista sobre la primera medida que quiere tomar dentro del Consejo de Ministros, como es la de modificar el Código Penal para garantizar que en las relaciones sexuales “sólo sí es sí”. “Creo que las mujeres piden esta modificación de forma urgente”, ha apuntado.

El fin de una negociación

Han sido días complejos, en los que los dos socios de Gobierno han tenido que tragarse las palabras que dijeron el uno del otro en campaña; y en los que los partidos de la derecha -y sus medios afines- han vuelto a demostrar su incapacidad para asumir que hay una parte importante de los electores que consideran que España es mucho más que patrioterismo hortera y decisiones tomadas en los cenáculos de la almendra central madrileña.

Este martes, después de varias semanas de tensión e incertidumbre y tras la votación de investidura, Iglesias ha llorado. Yo soy muy sentimental y hoy ha habido elementos que me han emocionado mucho. Estar con Aina Vidal (diputada con cáncer), ver a Pablo Echenique, que es una de las personas más valientes que yo conozco y hemos pasado momentos duros juntos. No hay por qué ocultar las lágrimas cuando uno se emociona, forma parte de la condición humana”.