España es un país con una gran riqueza en lo que a la cultura se refiere y muchos de sus monumentos se encuentran repartidos por la Península Ibérica y también en las Islas Baleares y Canarias, que forman parte del territorio nacional.

Entre los elementos culturales a destacar nos paramos a analizar las construcciones y castillos templarios, fortalezas que sirvieron en la antigüedad como refugio y que hoy en día, muchos años después, representan a los lugares en los que se encuentran gracias a la espectacularidad de sus construcciones.

La Orden del Temple también es conocida como Orden de los Caballeros Templarios, o en un nombre más prolongado, Orden de los Pobres Caballeros de Cristo del Templo de Salomón. Su fundación data de la Edad Media, en tiempos de Cruzadas, y el objetivo era proteger a los peregrinos, si bien contó con otras actividades complemetarias. 

En toda Europa, los Templarios contaron con hasta 800 castillos para los caballeros de la orden, combinados con templos, en los que pudieron convivir con su fe. En España aún se conservan muchos de los cerca de 100 lugares de la Orden de los Caballeros Templarios que existieron, y algunos de los más bonitos y referenciales los repasamos a continuación. 

Castillo de Ponferrada (León)

Es uno de los referentes de los Templarios en España. El Castillo de Ponferrada, situado en el municipio de mismo nombre, dentro de la comarca del Bierzo, en León, es un lugar fascinante, que recuerda a un castillo de los que encontramos en los cuentos infantiles. 

La Orden de los Templarios mandó en Ponferrada a partir del año 1178, ampliando el castillo original, hasta convertirse en uno de los puntos de defensa más relevantes del Camino de Santiago. Si sigues una ruta de los castillos y monasterios templarios, el Castillo de Ponferrada, a orillas del Río Sil, es un lugar de paso obligatorio que no te decepcionará. Su horario de visita es, de martes a domingo de mañana y tarde. 

Castillo de Peñíscola (Castellón)

Dentro de la Orden de los Templarios, el Castillo de Peñíscola es uno de sus monumentos más destacados, como una fortaleza emblemática y a la que su alrededor, por la situación al lado del mar, aumenta si cabe su atractivo cultural en la actualidad. Posesión de los árabes hasta el Siglo XIII, el Rey Jaime I, el Conquistador, se hizo con él para que los Caballeros del Temple lo gestionaran. El castillo fue abandonado y en el Siglo XV, el Papa Luna lo convertiría en sede pontificia. 

Para visitar el Castillo de Peñíscola, puedes optar por una visita teatralizada, que se realiza tanto en horario diurno como en horario nocturno. Hay una app de uso gratuito para conocer tanto los horarios como la agenda cultural del sitio. 

Castillo de Monzón (Huesca)

En Huesca tenemos otro de los castillos de referencia para los templarios, en territorio nacional. El Castillo de Monzón se construyó en el Reino de Aragón y es una fortaleza musulmana que en 1143 pasó a ser propiedad de los Templarios. En este lugar se educaría el Rey, Jaime I el Conquistador, y en la actualidad está catalogado como Monumento Nacional, con un centro de interpretación de la historia de la Orden de los Templarios en España en su interior, además de un exterior con gran atractivo. 

Ermita de San Bartolomé de Ucero (Soria)

Para finalizar la ruta por las sedes de los templarios, vamos más allá de los castillos y nos centramos en una iglesia, parte del Monasterio de San Juan de Otero, llamada la Ermita de San Bartolomé de Ucero. Su situación es espectacular, en un meandro del Río Lobos, en Soria, y es una de las visitas imperdibles del Cañón del Río Lobos, con un sendero que conduce al santuario románico del Siglo XII. 

El Parque Natural del Río Lobos y la ermita de San Bartolomé hacen de esta zona un lugar que no hay que perderse en la increíble Soria.