Judith Leyster, la gran pintora cuyas obras se apropió Frans Hals y el Louvre negó su autoría
En 1893, en una limpieza, se supo que una pintura admirada como obra de Hals en realidad había sido pintada por Leyster. Durante dos siglos sus obras fueron erróneamente atribuidas a él, a sus compañeros de trabajo e incluso a su marido