En todos los sentidos. La ceremonia más grande de la música en español nos ha puesto en medio de la tormenta de la música latina con la primera edición fuera de Estados Unidos, pero también ha sido un espejo en el que mirarnos para darnos cuenta de algo que escuché fuera de micrófono a uno de los más grandes artistas de música latina.

Fher, el líder de Maná, allá por los 90, reconoció estar muy contento por tener conciertos en España, pero no pudo evitar recordar que una gira por México supone más de 80 conciertos y con infinitamente más público de lo que son 20 fechas en nuestro país. Nos creemos el ombligo del mundo y, a día de hoy, hay que reconocer que hemos sido reconquistados culturalmente más de 500 años después. No por ser fuente histórica de lenguaje y ritmos vamos a ser protagonistas del panorama musical en español, rodeados de 460 millones de personas que hablan nuestro idioma.

Es verdad que si en algún rincón del mundo, fuera de Estados Unidos, es una buena idea representar la música con sello latino, y por tanto, español en su esencia, es en Sevilla. La primera vez que abandonan el suelo norteamericano es para vestirse “de un color especial”. Es simbólico que lleguen hasta lo que fue la capital de la Carrera de Indias tras la gesta de las tres carabelas.

El filtro de los Grammy

Bienvenidos sean los ritmos latinos a España… si son buenos. Todos sabemos del rechazo que provoca la falta de talento en muchas de las producciones del género en todos aquellos que tenemos orejas y sensibilidad musical, pero afortunadamente la marca Grammy se encarga de filtrar por nosotros. Esta ceremonia es, pues, la mejor excusa para pescar buenas canciones para La Mejor Playlist.

Comencemos por el escenario. El Palacio de Congresos y Exposiciones de Sevilla, conocido como Fibes, es un lugar de prestigio y versatilidad. Ha acogido desde cumbres de líderes europeos y de la OTAN hasta los Premios Goya de 2019 y, lo más parecido, los MTV Europe Music Awards. Los sevillanos pudieron disfrutar allí de todo un Dylan, por ejemplo.

Mientras preparo estas líneas, recibo una llamada para intervenir en una televisión y preguntarme qué opino de que Julio Iglesias no esté invitado. Un hombre cuyo único objetivo en los albores de su carrera fue colarse en el Billboard norteamericano, hasta presionar en público al primer director de Los 40, no puede llevar bien esta afrenta. Esto es una muestra clara de que nada tienen que ver los creadores de esta década con los de hace medio siglo. América ya es otra. Y el público, muy distinto. No encaja bien el que fuera durante décadas la encarnación de lo latino en el mundo con los ritmos actuales.

La italiana más latina

La que, sin embargo, lleva ya tres décadas en la música y ha sabido adaptarse a los tiempos sin variar su esencia ha sido una de las galardonadas de esta edición: Laura Pausini. En perfecto español, agradeció el premio de Persona del Año con la emoción de quien se siente adoptada. Y ella puede ser un excelente punto de partida para encontrar alguna de las canciones que buscamos para nuestra playlist. “La soledad” marcó sin duda un antes y después en la música en español, allá por aquellos 90 en los que vendió más de tres millones de copias de discos físicos.

Habrá que incluirla. La italiana hispanoparlante derramó sus lágrimas en el Conservatorio Profesional de Música Francisco Guerrero en Sevilla, cuando los alumnos le interpretaron sus canciones, y eso elevó su temperatura emocional al máximo, claro.

Laura fue una de las protagonistas de los Latin Grammy 2023. En la gala de anoche, a pesar de algunos pequeños fallos técnicos, pudimos ver con calidad la puesta en escena de los ritmos que nos invaden. Una ocupación que va más allá de lo musical, y que influye hasta el punto de que las estéticas latinas, extremas y exuberantes, que antes de la era internet eran más locales, son observadas y replicadas por nuestra juventud.

En cuanto a los presentadores, ninguno de ellos tenía ese oficio. Los que sí lo somos venimos sufriendo el intrusismo profesional de quienes por ser actores o simplemente famosos creen que pueden resolver con solvencia la conducción de una gala. No obstante, en esta ocasión excepcional la papeleta estuvo bien resuelta.

La sevillana Paz Vega supo darle emoción a cada introducción. "Pensar que los ojos del mundo están puestos en esta ciudad es un momento hermoso", dijo. Roselyn Sánchez, actriz y cantante puertorriqueña, ya tiene su master como presentadora con cinco ceremonias a su cargo. Se le escapó que le viene pequeña Sevilla cuando dijo "es más pequeño de lo que estamos acostumbrados, pero es lindo porque nos da mucha complicidad"​. Recibido. El poderío de las plataformas de vídeo se escenifica con Danna Paola: cantante mexicana, sí, pero que viene por Élite, de Netflix. Esta sí se ha colado. En cuanto a Sebastián Yatra, conoce muy bien los premios: ya ha recibido 15 nominaciones. Aquí su mánager puede marcarse el tanto, ya que hemos podido saber que fue idea suya más que de la organización.

Rojo pasión

Los trofeos representan con una peana de color rojo, a diferencia del negro habitual, la intención de los organizadores de que se tiña todo del color de la pasión. Y otra cosa no sé, pero pasión en este país, nos sobra, y somos buena cuna para que nazca.

Entremos ya en la gala. Las principales categorías de las más de 50 que hay son las que atraen toda la atención, claro. Me lanzo directo a la que más nos interesa. ¿Cuál piensan los señores Grammy que es la mejor canción latina de 2023? Los favoritos y nominados eran "Acróstico" de Shakira, "Amigos" de Pablo Alborán y María Becerra, "De Todas Las Flores" de Natalia Lafourcade, y la premiada, "Shakira: Bzrp Music Sessions, Vol. 53" de Bizarrap y Shakira​

Meter esta creación vengativa entre los grandes temas de The Beatles, Elton John u otros grandes artistas de nuestra playlist puede levantar, con toda la razón, alguna ampolla. Me reservo el derecho de no incluirla.

Aunque ya no es lo que era en cuanto a producto físico, el concepto álbum sigue siendo fundamental para aquellos artistas que desean ofrecer algo más que temas sueltos y gozarse dando un discurso musical con sentido. En la categoría de Álbum del Año, destacaron nominaciones como La Cu4rta Hoja de Pablo Alborán, De Adentro Pa’ Afuera de Camilo, y De Todas Las Flores de Natalia Lafourcade​. El premio se fue para una de las triunfadoras de la noche, quien portaba uno de los vestidos más extremos de la gala: Mañana Será Bonito de Karol G. Uno de sus temas comienza con algo que agradecer.

Un poco más y se nos queda en el tintero. Comienza el tema con una versión muy especial de un grandísimo ejemplo de cómo la música puede ser tan humana como para ser interpretada solamente con el cuerpo. Bobby McFerrin nos invitó a tomarnos la vida con humor en aquel legendario "Don’t Worry Be Happy".

Gracias, Karol G. Una de las actuaciones estelares de la noche, la de Ozuna, contó con uno de los grandes transformadores de la música electrónica hacia las grandes masas que sí puede estar con alguna de sus producciones en nuestra lista: David Guetta. De todos los temas en los que ha participado, bien merecedora de estar en la lista está su alianza con Black Eyed Peas en un himno que ha hecho bailar a millones de personas en todo el planeta: "I Got a Feeling". En el multitudinario Tomorrowland de 2017 usó con inteligencia los filtros y demás recursos técnicos para llevar al respetable a la locura en medio de una montaña de fuegos artificiales.

Alejandro Sanz, estrenando nuevo look, es otro gran artista que, sin duda, no se nos puede olvidar. En los Grammy de Sevilla reivindicó con su canción más importante, en su versión más flamenca y con una coreografía enorme en el día mundial del flamenco, el papel de lo español en lo hispano. "Corazón partío", es un must. Y cosechó reacciones en todo el mundo.

En el Universo del rock se nos quedaron sin pasar de nominados nuestros queridos Arde Bogotá, que, en medio de tanto ritmo urbano, afortunadamente reivindican el rock de toda la vida. Una isla en medio del océano. El premio como mejor álbum de rock se fue para una suerte de invento ecléctico y eléctrico que aspira a ser setentero y postmoderno, pero se queda en intento. "Leche De Tigre", de Diamante Eléctrico y Adrián Quesada.

¿Rock? Que no lo oigan los puristas. Bunbury, también nominado en la categoría de mejor canción rock con “Alaska”, perdió en favor de Lasso y una canción claramente pop, pero afortunadamente nos traen al artista que hubiera ganado si siguiera cantando “Entre dos tierras” con Héroes del Silencio. A esta gran creación sí hay que hacerle sitio en nuestra lista. Sin duda.

Otros de los nombres de la noche fue el de Natalia Lafourcade, que se llevó tres premios, incluyendo el de Mejor Grabación del Año por Todas las flores, además de ser reconocida como ganadora en la categoría de Mejor Álbum de Cantautor y Mejor Canción de Cantautor​. Bien merecedora de estar entre nuestras canciones sería el homenaje a la música latina de siempre en este “Soledad y el mar”.

Julieta Venegas, que hizo gala de su habitual carisma positivo, también recibió su gramófono como mejor Álbum Vocal Pop con Tu Historia, aunque si tenemos un hueco para ella, será sin duda para su gran éxito de 2006 “Me voy”.

En resumen, una gala claramente americana en la que España se puso en su sitio. Para recibir en la capital del arte y el embrujo a tanto latino que ahora invade nuestras listas y plataformas, y para darnos cuenta de que somos, con todas nuestras diferencias, un país más en medio de todo el universo hispanohablante.