Unicef ha reconocido a 32 centros educativos españoles como referentes en Educación en Derechos y Ciudadanía Global. En la lista de galardonas figura la Escuela Infantil Triquitraque de Puerto Real, en Cádiz, gestionada por Clece.

Se trata de una acción promovida por Unicef en colaboración con las distintas consejerías de Educación para impulsar la educación en derechos de infancia, tal y como marca la Convención sobre los Derechos del Niño y como una de las aportaciones al Pacto por la Educación. La iniciativa tiene como finalidad impulsar y reconocer el esfuerzo de los centros educativos en la ejecución de proyectos a largo plazo e incentivar la mejora permanente y la innovación en la educación en derechos.

La iniciativa tiene como finalidad impulsar y reconocer el esfuerzo de los centros educativos

“Mucho trabajo, esfuerzo, numerosos cambios y la colaboración y coordinación, tanto con los alumnos como con los docentes y familiares, pero, sobre todo, ilusión”, comenta Sonia Brenes, directora de la EIM Triquitraque, que han marcado todo el proceso para llegar a ser reconocidos como Centro Referente en Educación en Derechos de la Infancia y Ciudadanía Global.

Triquitraque es una Escuela Infantil situada en la barriada de las 512 Viviendas de Puerto Real. Cuenta con 82 plazas de 0 a 3 años y está adherida a la Junta de Andalucía. El equipo lo forman seis educadores, dos auxiliares, una persona de cocina y limpieza, una persona de mantenimiento y la directora. Y, como explica Rafael Verdugo, Jefe de Servicios de Clece, el proyecto que siguen todas las escuelas infantiles y que se refleja también en el trabajo de la Escuela Infantil Triquitraque “está orientado a potenciar el crecimiento global de los niños en todas y cada una de sus capacidades: físicas, afectivas y emocionales, cognitivas, sociales y ético-morales”.

La Escuela Infantil Municipal EIM Triquitraque de Puerto Real, en Cádiz, gestionada por Clece.

Su directora Sonia Brenes explica que llevan tiempo realizando cambios con Unicef a todos los niveles tanto en el currículo escolar como en la relación con los alumnos y familiares. “Lo principal es tener en cuenta al niño como sujeto de derechos y a partir de ahí trabajar para que se asimilen los valores a través de muchas actividades didácticas e innovadoras con alumnos y familiares. La educación es esencial para sembrar la solidaridad y conciencia en los niños. Desde muy pequeños les trasmitimos estos valores y su práctica para que lo hagan el resto de su vida”, comenta Brenes.

Todas las iniciativas que se ponen en marcha en esta escuela infantil están enfocadas a cómo dar a conocer al alumnado sus derechos, de modo que la acción educativa se oriente a proteger, defender e impulsar dichos derechos y a formar parte del entorno protector de los niños en colaboración con las familias, la comunidad y las autoridades.

Continuar el papel de garantes de los derechos de la infancia conlleva una serie de responsabilidades

Entre sus actividades, se encuentran el buzón de la infancia, la celebración del Día de la Paz, talleres o el proyecto solidario Por trimestre una razón, en la que los padres participan en la entrega de juguetes, alimentación infantil o productos de higiene, que recogen luego Cáritas o Madre Coraje para las familias más desfavorecidas de Puerto Real. Además, también realizan actividades dirigidas a fomentar el cuidado y conservación del entorno. Este curso están trabajando el cambio climático y el calentamiento global.

Sonia reconoce que “continuar el papel de garantes de los derechos de la infancia conlleva una serie de responsabilidades y mucho esfuerzo, pero aun así es un trabajo muy bonito e ilusionante y seguiremos trabajando para poder tener este reconocimiento de nuevo, lo que significaría que nuestro modelo funciona. Creemos firmemente que la educación es el instrumento fundamental para cambiar el mundo”.



Este contenido ha sido elaborado con la colaboración de Clece