Según las autoridades alemanas, más de 40 fieles que asistieron a una misa tras aliviarse el confinamiento en Alemania, a principios de este mes, se contagiaron de coronavirus, y al menos 6 de ellos tuvieron que ser trasladados al hospital. Esto ocurría el 10 de mayo en una iglesia bautista en Frankfurt, y sus funcionarios han defendido que se siguieron las normas de distanciamiento entre personas, y que previamente al servicio se desinfectó toda la zona por precaución.

Al menos 16 de las personas infectadas vivían en Hanau, al este de Frankfurt. Como consecuencia, la ciudad decidió suspender una reunión de oración que los líderes musulmanes habían organizado para este domingo, como método de prevención.

Cada uno de los 16 estados de Alemania determina su propio ritmo de desescalada y Hesse, donde se encuentra Frankfurt, relajó las restricciones al culto el 1 de mayo. Sin embargo, las medidas exigen que aquellos que asisten a los servicios deben mantenerse separados por un metro y medio y deben llevar encima desinfectante de manos.

Wladimir Pritzkau, subdirector de la congregación evangélica cristiana bautista de Frankfurt, dijo en los medios alemanes que las reglas se cumplieron durante el servicio del 20 de mayo.

Por el momento, Alemania ha registrado un número relativamente bajo de casos y muertes de Covid-19: 177.850 y 8.216 respectivamente, según el Instituto Robert Koch, un organismo federal de salud, lo que permitió un alivio de las medidas restrictivas.

Las tiendas ahora vuelven a abrir, los alumnos vuelven a clase y la Bundesliga se ha convertido en la primera liga de fútbol más importante de Europa en reanudarse después de la pandemia.