El verano es una época para el disfrute del buen tiempo al aire libre, pero uno de sus principales inconvenientes son las picaduras. En este artículo vamos a aprender a diferenciarlas para poder saber cómo aliviarlas en cada caso.

El jefe de Alergología de los hospitales Quirónsalud Campo de Gibraltar y Quirónsalud Córdoba, el doctor Ignacio García Núñez, resalta que la picadura más frecuente durante la etapa estival es la del mosquito: “Son bultitos rojos, que causan picor, inflamación y enrojecimiento en la zona, y que permanecen uno o dos días”. La picadura del mosquito tigre, además del picor y de la inflamación, pueden provocar otros síntomas, como reacciones muy grandes, fiebre, dolor en las articulaciones, cefalea, intolerancia a la luz, así como enrojecimiento facial y corporal.

A la hora de evitar estas picaduras, el experto en Alergología habla de los repelentes de insectos (los hay químicos o naturales y derivados de las plantas, menos tóxicos, aunque protegen menos tiempo que los químicos. “Emanan un olor que espanta a los mosquitos. Se comercializan en diferentes formatos, siendo el más popular la pulsera". También hace referencia a la utilidad de las mosquiteras en las casas, en el carrito del bebé, o incluso en la cuna o en la cama.

Cuidado con las picaduras de abeja y de avispa

El jefe del servicio de Alergología de los hospitales Quirónsalud Campo de Gibraltar y Quirónsalud Córdoba advierte de las picaduras de abeja y de avispa que, según reconoce, causan picor, inflamación y dolor, con una intensidad mayor que las picaduras de mosquito.

“En los casos más graves pueden llegar a necesitar tratamiento médico, especialmente en las personas con alergia al veneno de estos insectos", apunta. Entre las posibles reacciones, que pueden ser leves o generalizadas, están la urticaria, el angioedema –hinchazón similar a la urticaria pero en este caso bajo la superficie de la piel– e incluso la anafilaxia –reacción alérgica intensa y generalizada que afecta a todo el organismo–.

"No debemos espantarlas cuando se colocan sobre nosotros. Aunque aguantarse sea muy complicado debemos permanecer quietos o realizar movimientos muy lentos hasta que se vayan"

dr. Ignacio García Núñez

A la hora de prevenirlas, el doctor hace hincapié en no aproximarnos a los nidos o las colmenas, porque las avispas y las abejas pueden picar al sentirse amenazadas. “Tampoco debemos introducir las manos en los tejados o en los agujeros, que es donde hacen sus nidos. No debemos espantarlas o intentar matarlas cuando se colocan sobre nosotros, aunque aguantarse sea muy complicado. Debemos permanecer quietos o realizar movimientos muy lentos hasta que se vayan", agrega.

Adicionalmente, recomienda usar vasos cuando organizamos comidas al aire libre, en lugar de beber directamente de las latas, porque podemos llevarnos la sorpresa de que se introduzcan en ellas. También debemos mantener bien cerrados los cubos de la basura.

Evitar los olores y colores intensos

“No debemos andar sin calzado en la piscina, en el campo, ni en los jardines. Antes de secarnos con la toalla, debemos agitarla muy bien al levantarla del suelo. Se debe realizar la misma operación con la ropa que se haya dejado en el suelo: sacudir antes de poner. También otra opción es descartar los colores llamativos (como el rojo, el morado y el amarillo), que atraen a las abejas y a las avispas y optar por ropa con colores apagados”, remarca.

Ignacio García Núñez, jefe de Alergología de los hospitales Quirónsalud Campo de Gibraltar y Quirónsalud Córdoba.
Ignacio García Núñez, jefe de Alergología de los hospitales Quirónsalud Campo de Gibraltar y Quirónsalud Córdoba.

En las excursiones por la montaña y el campo debemos evitar los perfumes muy intensos. En el caso de los peques, el doctor García Núñez sugiere que lleven pantalones y manga larga. “Debemos colocar una placa de alerta médica a los niños que son alérgicos al veneno de avispa o de abeja”, añade.

Garrapatas, hormigas y arañas

El especialista de Quirónsalud advierte sobre las picaduras de garrapata, frecuentes desde la primavera. Producen un enrojecimiento en la zona donde se encuentra adherida la garrapata, que trata de chupar la sangre: “Atención porque estos animales pueden transmitir enfermedades, por lo que se deben retirar enseguida acudiendo a un centro hospitalario. No se recomienda hacerlo en casa porque pueden quedar restos en el cuerpo”.

Sobre las picaduras de hormiga, apunta que provocan hinchazón, pus y, en ocasiones, se forma una ampolla; mientras que las de araña tienen un aspecto de diana y provocan mucho picor. En el caso de las pulgas, las identifica como multitud de bultitos que están agrupados y generan mucho picor; y en cuanto a las de tábanos habla de nódulos en la piel, que además son muy dolorosos.

Cómo aliviarlas y curarlas

García Núñez aporta las siguientes recomendaciones a la hora de aliviar estas picaduras:

    1. Prohibido rascarse. No es la mejor forma de calmar la molestia. Con ello pica más y la piel se erosiona y se infecta.
    2. Quitar los anillos, los relojes y las prendas que comprimen la zona afectada.
    3. Colocar hielo en la zona afectada.
    4. Levantar la extremidad en la que se ha producido la picadura.
    5. Limpiar las ampollas con cuidado para que no se rompan con agua y jabón, para prevenir las infecciones secundarias.
    6. Consultar con el médico la toma oral de algún antihistamínico o la aplicación de un corticoide en la piel para calmar el picor, especialmente en el caso de los niños.
    7. Utilizar productos con amoniaco, de venta comercial, que alivian las molestias de las picaduras de mosquito, tábanos, abejas, y avispas.
    8. Sacar el aguijón en las picaduras de abeja con unas pinzas finas, sin ejercer presión porque puede romperse y con un movimiento suave, similar al de un arañazo con la uña, sin tirar del aguijón.
    9. Alejarse del lugar donde nos ha picado una avispa, ya que puede picarnos más veces y además expulsa feromonas que llaman la atención de otras avispas.
    10. Comprobar la evolución de las picaduras para detectar cualquier infección.
    11. Consultar el tratamiento más adecuado si la reacción es muy severa.
Consejos de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) para evitar las picaduras de abeja o avispa.
Consejos de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) para evitar las picaduras de abeja o avispa.