El Instituto de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) ha determinado que las mascarillas que la Comunidad de Madrid ha repartido entre la población ofrecen un filtrado de partículas "deficiente", pues dejan pasar casi un 40 % de las gotas más pequeñas o aerosoles. Así lo establece un informe del INSST realizado a petición de la asociación FACUA-Consumidores en Acción, según el cual para que una mascarilla pueda considerarse FFP2 solo puede dejar pasar un máximo del 6 % de partículas.

En una nota de prensa remitida este jueves, FACUA afirma que hay "graves irregularidades" en dichas mascarillas, de las cuales dice el informe del INSST que "no cumplen los requisitos" de la categoría KN95 o FFP2 -la equivalente en la Unión Europea- como las distribuye el fabricante chino Whenzou Haoshou Home Textile. FACUA informa de que "hasta la fecha" no ha obtenido respuesta de la Comunidad de Madrid después que le pidiera información la semana pasada "ante las numerosas anomalías en el etiquetado" de dichas mascarillas. 

Según FACUA, el Gobierno regional madrileño ha recomendado a la población utilizar estas mascarillas "durante 48 horas, cuando la OMS y organismos de salud pública de la UE y EEUU aconsejan limitar el uso de este tipo de mascarillas a entre 4 y 8 horas". Asegura además que la Consejería de Sanidad tampoco le ha aclarado, como le solicitó, si antes de ser distribuidas las mascarillas "habían sido analizadas en España".

FACUA considera que son de "extrema gravedad las prácticas en las que ha incurrido la Comunidad de Madrid, poniendo en riesgo a la población al darles una sensación de falsa seguridad con unas mascarillas publicitadas como FFP2 o KN95 sin cumplir los requisitos y habiendo eludido la realización de análisis previos".

Según la asociación, "la irresponsabilidad del Gobierno autonómico madrileño ha sido aún mayor" por no paralizar la distribuición de las mascarillas después de que trascendieran "las primeras irregularidades en su etiquetado, al ponerse de manifiesto que los certificados de homologación europea de las mascarillas eran falsos".

La organización destaca que, según el informe, las unidades de mascarillas analizadas "dieron resultados diferentes, con rangos amplísimos entre ellas, lo que impide clasificarlas en ninguna categoría. Y en ningún caso se corresponden con las indicaciones del fabricante". Agrega que "solo una" de las cinco muestras analizadas cumplió con el requisito para una mascarilla FFP2 de que "la penetración máxima debería ser del 6 %".

El análisis realizado por el INSST, organismo autónomo adscrito al Ministerio de Trabajo, fue realizado tras una petición realizada a comienzos de la semana pasada por FACUA-Consumidores en Acción a los ministerios de Consumo y Sanidad.