Una buena salud pulmonar es fundamental para disfrutar de una vida activa, plena y libre de enfermedades respiratorias. Aunque con mucha frecuencia nos olvidamos de ellos, los pulmones son los órganos que se encargan de oxigenar nuestro cuerpo y de eliminar el llamado dióxido de carbono, un gas que exhalamos, entre otras cosas. La buena noticia es que hay maneras naturales y saludables de cuidar de nuestros pulmones y no sólo evitando el tabaco o la contaminación. Respirar una mejor y más limpia aire es posible con pequeños cambios en la rutina diaria de la vida.

La importancia de cuidar tus pulmones a diario

Los pulmones no son iguales

El pulmón derecho es más grande que el pulmón izquierdo y se divide en tres lóbulos a diferencia de este que solo tiene dos debido al espacio que ocupa el corazón. Ambos pulmones están protegidos por las costillas. Ambos pulmones están recubiertos por una membrana llamada pleura, la cual está lubricada para poder evitar roces con las costillas. Esta estructura tan compleja y funcional necesita unos cuidados constantes para poder respirar bien todo el tiempo sobre todo en las ciudades donde la calidad del aire es más baja.

Una respiración consciente mejora la función pulmonar

Técnicas sencillas como la respiración profunda o los ejercicios de control respiratorio pueden hacer milagros. No sólo se puede mejorar la oxigenación del cuerpo, sino que al mismo tiempo se puede expulsar la mucosidad acumulada y, por tanto, aliviar la presión ejercida sobre los pulmones. Apoyarse las manos sobre el pecho e inhalar profundamente, por ejemplo, es una manera de reconectar con la respiración y notar cómo trabajan los pulmones.

Cómo limpiar tus pulmones de forma natural

La terapia de vapor como aliado respiratorio

El vapor de agua inhalado es una de las mejores técnicas que existen para abrir las vías respiratorias y facilitar la eliminación de las secreciones. Siendo muy útil en climas fríos o en personas con patologías pulmonares crónicas, también ayuda a disminuir la inflamación y proporciona un alivio inmediato. Puede ejecutarse con un humidificador, en una ducha caliente o simplemente respirando sobre un recipiente con agua caliente.

La tos controlada, una técnica terapéutica

Más allá de ser tan solo el reflejo corporal, la tos puede considerarse como una vía terapéutica más. La tos controlada permite movilizar las secreciones acumuladas en los pulmones sin producción de fatiga y sin hacer daño a las vías aéreas. Su uso es realmente recomendado por los facultativos y los fisioterapeutas entre las personas que padecen EPOC y bronquitis crónica porque permite desobstruir las secreciones pulmonares de una forma más eficiente y segura.

Estilo de vida saludable para fortalecer los pulmones

Practicando ejercicio de manera regular, uno de los recursos que demostraron ser más eficaces para hacer robustos los pulmones es el que permite al aumentar de las frecuencias de respiración, ya que un mayor flujo respiratorio implica una mayor dificultad y una mayor exigencia de oxígeno, hecho que mejora la eficiencia del sistema respiratorio. Además, la práctica deportiva favorece la eliminación de toxinas, también permite mejorar la circulación sanguínea, cuya función principal es permitir que el oxígeno llegue a todas las células del organismo.

Alimentación antiinflamatoria y antioxidantes naturales

Los alimentos antiinflamatorios, como las frutas, las verduras, las nueces y el té verde, contribuyen a disminuir la inflamación de la mucosa de las vías respiratorias; esto no sólo aumenta la capacidad pulmonar, sino que también alivia síntomas como el pecho cargado o la disnea. La característica diferenciadora del té verde es su alta concentración de antioxidantes, dato correspondiente al hecho de que el té verde protege las células pulmonares del daño ambiental.

Proteger la salud de los pulmones no implica grandes sacrificios personales, sino estar comprometidos con unas costumbres de vida más saludables. Respirar a fondo, tomando aire y dejándolo salir lentamente y sin apremio, es posiblemente una de las sensaciones más agradables que pueda existir. Mantener los pulmones limpios, además, es un ingrediente necesario para que se pueda disfrutar de esta sensación.