Acabó Sueños de libertad (Antena 3) este martes 6 de mayo a las cinco de la tarde en punto y apareció Natalia Sánchez, Begoña en la ficción, junto a Sonsoles Ónega. La presentadora de Y ahora Sonsoles recibió en plató a la actriz con motivo de los 300 capítulos de Sueños de libertad. La serie, desde su estreno en febrero de 2024, se ha convertido –con permiso de La Promesa– en la serie española más vista. La ficción creada por Beatriz Duque y Verónica Viñé y producida por Diagonal TV fue el relevo de Amar es para siempre. Las expectativas eran altas y, a tenor de los resultados, fueron colmadas.

En plató, Natalia Sánchez habló sobre Begoña, la protagonista de Sueños de libertad, una mujer maltratada por su marido, Jesús (Alain Hernández), que se enamora de su cuñado, Andrés (Dani Tatay). Esa es la punta del iceberg, pues, tras 300 entregas, en el serial de época de Antena 3 ha pasado de todo.

"Es un vivir también para nosotras, eh", reconoció la actriz tras ver una escena de Begoña, su cuñado y amante Andrés, y la mujer de este, María (Roser Tapias). "Nos llevamos la palma, pero ahí está la dificultad y el entretenimiento; por nuestra parte también", añadió.

Y, aunque los intérpretes de los seriales no puedan ni deban adelantar acontecimientos, Natalia Sánchez hizo una excepción en Y ahora Sonsoles y dejó caer que un miembro de ese triángulo amoroso –Begoña, Andrés y María– podría morder el polvo más pronto que tarde.

"Van a pasar muchísimas cosas. La serie va a dar un giro importante. Este es de verdad", prometió Natalia Sánchez. La intérprete describió a su hija en la ficción, Julia, como una niña inteligente y con carácter.

"Ahora estamos en un momento muy delicado porque, a raíz de la muerte de Jesús, la tutela de la niña pasa a ser de María. Confiamos en que les den la nulidad [matrimonial a Andrés y María] y no se la dan. Entonces, el obstáculo va a estar... Tiempo. A no ser que...", comentó la intérprete. A su lado estaba el humorista y presentador Miguel Lago, que remató: "La muchacha [María] lo ha dicho: 'Estamos casados hasta que la muerte nos separe'. Y en esta serie se disparan las pistolas. Un agarrón, 'te tiro de aquí', 'te tiro para allá', escaleras abajo...". Natalia Sánchez confirmó sus sospechas: "No vas desencaminado, pero no lo voy a decir aquí".

Sánchez, célebre por Los Serrano y Amar en tiempos revueltos, ofreció una interesante reflexión sobre la lucha de Begoña y María por el amor y la custodia de Julia "Los niños jamás tienen la culpa. La responsabilidad es siempre de los adultos, pero efectivamente... Son víctimas de adultos que no saben gestionar sus emociones y manipulan a los niños", reflexionó. La actriz tiene muy claro que la 'mala de la película' es María por mentir y manipular a la niña, y tranquiliza a los sufridos espectadores: "Todo llegará".

A la vuelta de la esquina no está el final de Sueños de libertad. Natalia Sánchez da fe de ello: "Queda mucho por contar. Normalmente, cada viernes recibimos [los guiones de] seis capítulos nuevos. Estudio todos los días. Grabamos un capítulo y medio, unas 80 páginas al día, en 2 ó 3 unidades". La actriz reconoce que Amanda Cárdenas, la actriz que interpreta a Julia de la Reina, se parece mucho a su hija en la vida real. Es con ella con quien más disfruta las secuencias de Sueños de libertad.

"Cada día pasan cosas. Vamos a un ritmo frenético; a veces mezclas secuencias. Hemos tenido apagones... El lunes [28 de abril] tenía que venir aquí y por eso no fui a grabar. Vino un coche a buscarme y no me subí porque los niños no habían venido del cole. Alarmas, incendios, simulacros... Por lo general es bastante normal. Rodamos nueve horas y tenemos media hora para comer", desveló a Sonsoles Ónega y el resto de presentes en plató. Ana Obregón inclusive.

Natalia Sánchez, Begoña en Sueños de libertad, manifestó públicamente que no estaba de acuerdo con la muerte de Jesús de la Reina, al que interpretó Alain Hernández. "Pero... Me da mucha pena cuando paso por su camerino. Es un compañero maravilloso y le echo mucho de menos", aseguró. Lo cierto es que el actor se comprometió a una única temporada de Sueños de libertad, por lo que los guionistas tuvieron que ingeniárselas para despedir al personaje.

La actriz reconoció que el ritmo de grabación es tan frenético que no tiene tiempo ni para "pasar" el texto (ensayar) y desveló que hizo el casting en junio de 2023 sin ningún tipo de expectativa. "No creía que nos fuéramos a vivir a Madrid porque estábamos [ella, su pareja Marc Clotet y sus dos hijos de 5 y 6 años] en Barcelona. Y aquí estamos un año y medio después", sentenció.