Madrid está siendo estos días el escenario del encuentro anual de Escuelas Asociadas de la UNESCO donde se abordará uno de los temas que más preocupa a la sociedad como es el cambio climático. Aunque es innegable el impacto medioambiental que está provocando este terrible fenómeno provocado por el hombre, hay otra realidad innegable menos conocida como es el impacto y las consecuencias que están padeciendo los pueblos indígenas de América Latina.

El clima de América Latina está cambiando a pasos agigantados. Las altas temperaturas afectan a la fauna autóctona y las grandes inundaciones arrasan los cultivos de los pueblos indígenas. El cambio climático agudiza las dificultades de estas personas y trae consigo además problemas políticos y económicos, así como las violaciones de los derechos humanos, la discriminación y el desempleo.

Por ello este XXXII Encuentro nacional es tan relevante para estos pueblos. Un espacio de trabajo en el que se darán cita más de un centenar de Escuelas Asociadas de la UNESCO con el objetivo de escuchar a más de 40 líderes indígenas representantes de muy diferentes pueblos y culturas de América Latina y el Caribe.

Los pueblos indígenas, en su diversidad, representan una gran esperanza para la humanidad. Sus particulares cosmovisiones, sus propuestas sobre la necesidad de fomentar procesos de desarrollo, siempre sostenibles y respetuosos con el medioambiente y su reivindicación de las culturas diferenciadas como un tesoro que la Comunidad Internacional debe preservar, constituyen algunos de los elementos en los que debemos apoyarnos para imaginar nuevas maneras de relacionarnos entre los seres humanos y con el resto de las especies con el fin de preservar el ecosistema en el que vivimos.

Este encuentro lo que pretende es que aproximarnos a los aspectos más positivos que caracterizan a los pueblos indígenas desde una mirada realista, pero sobre todo, esperanzadora y optimista, pues estamos convencidos de que con ellos y desde ellos, podemos transformar el mundo y hacer frente al cambio climático.

La red internacional de Escuelas Asociadas de la UNESCO es un programa educativo creado en 1953 con la finalidad de facilitar y potenciar el intercambio de experiencias, proyectos y materiales didácticos entre diferentes centros educativos de todo el mundo. Se trata del movimiento más grande de Escuelas, a nivel internacional y nacional de Escuelas, y en España reúne a más de 200 Escuelas de diversas tipologías (centros públicos, privados, religiosos y laicos), desde educación infantil hasta universitarios, que comparten la sensibilidad por impulsar y desarrollar aquellos objetivos clave para la UNESCO. Dichas Escuelas se configuran como laboratorio de ideas para estimular pedagogías innovadoras y creativas para llevar a la práctica conceptos globales en la escuela y, para que desde las aulas y a través de la Educación se consiga la paz y la solidaridad en el mundo.

Sensibilizar a la sociedad y hacer visibles a los pueblos indígenas como colectivos proactivos de la transformación social que participan de
manera activa en foros internacionales como las Naciones Unidas son claves para ayudar a configurar nuevas realidades en los planos locales y globales en la lucha contra el cambio climático y el trabajo en favor de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.

Daniel Oliva Martínez es director de la Cátedra Pueblos Indígenas de la Universidad Carlos III de Madrid.