Dice que su tarjeta black le hacía sentir incómodo. Incómodo porque le parecía que no existía control suficiente sobre su uso y él estaba acostumbrado, por sus varios cargos públicos, a rendir cuentas de todos los gastos que realizaba. Hubo algunos directivos de Caja Madrid y Bankia que ante la sospecha no llegaron a utilizar esa Visa presuntamente opaca; él sí lo hizo, “pero correctamente”, precisa, “sólo para gastos relacionados con el cargo”.

Fuentes próximas al presidente de Bankia explican que no podía conocer la naturaleza de la tarjeta con que pagó

Virgilio Zapatero, exministro socialista en los ochenta, exrector de la Universidad de Alcalá, y también exconsejero de Caja Madrid, de BFA y de Bankia, es ese usuario de la tarjeta que se sentía incómodo. “No existía control y me incomodaba. Por eso he guardado todas las facturas de los gastos. Las tengo aquí. Todas”, ha explicado en el interrogatorio realizado por el fiscal y su abogado defensor en el macrojuicio por la presunta apropiación indebida realizada por 65 consejeros y directivos de Caja Madrid y Bankia al hacer uso de tarjetas supuestamente opacas.

A Zapatero se le dijo que podía disponer libremente de la tarjeta para todo tipo de gastos, y dice que eso no le gustó. “Yo me impuse la norma y el criterio de utilizarla sólo para gastos inherentes a la función de vicepresidente del consejo”. Así que la sacaba para sólo pagar viajes de representación, comidas, cenas...

Y, según ha subrayado durante su declaración (tanto como para mencionarlo en dos ocasiones en un interrogatorio relativamente breve), una de esas comidas fue singular, o lo ha sido a la postre. Singular porque el otro comensal de esa comida, que fue invitado con la tarjeta black, era el actual presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri.

Fuentes próximas a Goirigolzarri no desmienten que ese almuerzo existiera, y apuntan a El Independiente que el actual presidente de la entidad no podía conocer la naturaleza de la tarjeta cuando fue invitado por Virgilio Zapatero.

El exministro Virgilio Zapatero considera que Bankia "no ha actuado lealmente" con él durante el escándalo

El expolítico considera que “Bankia no ha actuado lealmente” con él. Según su versión, la entidad no ha querido contrastar en ningún momento los gastos realizados para los que tiene factura, y no se ha puesto en contacto con él para reclamarle ninguna cantidad, para luego encontrarse con el listado de gastos publicado en los medios de comunicación. “No se pueden imaginar el daño que hace dos años de juicio paralelo”, ha indicado. “A los 70 años, manchar una vida por unos miles de euros es demasiado”.

Según el escrito de acusación del fiscal, Zapatero realizó con su Visa gastos por importe de casi 36.000 euros. El expolítico ha reintegrado, en tres abonos diferentes, algo más de 27.000 euros, que son los que se corresponderían con los gastos para los que el propio acusado tenía factura y que reconoce de entre los recogidos en el famoso documento Excel elaborado por Bankia. “Reintegré el importe, y ahora Bankia pide que se lo pague otra vez”, ha dicho. En cualquier caso, Zapatero ha apuntado que en el listado de gastos se incluyen operaciones que él no ha hecho y que han dejado incluirse, no sabe por qué, algunos gastos que recuerda haber realizado (ha hablado, en concreto, de un viaje a Italia que fue pagado con la tarjeta, pero que no está incluido).

Zapatero ha subrayado que, cuando Bankia fue intervenida por el Estado, él renunció más de 100.000 euros que le correspondían de retribución variable como consejero y posteriormente también renunció al cobro de un seguro de vida por valor de otros 90.000 euros. "Era todo mío, y no lo reclamé", ha dicho. "Ahora Bankia me reclama 19.290 euros sin justificación alguna. Le he dado ya doce veces lo que me reclaman".