La ministra de Economía, Nadia Calviño, ha demandado a los empresarios españoles, en  presencia del comisario europeo de Asuntos Económicos, su “compromiso” para poder llevar a cabo una agenda social que reduzca las desigualdades, entre ellas la brecha de rentas, para, no solo hacer que el crecimiento económico sea incluyente, sino también para frenar así el ascenso del populismo.

Durante su intervención en una jornadas sobre crecimiento e inclusión social, Calviño ha realizado este llamamiento hasta en dos ocasiones, mientras el Gobierno mantiene una intensa negociación con Unidos Podemos para poder recabar su apoyo en la elaboración de los Presupuestos de 2019, en la que el Ejecutivo está haciendo de freno a las exigencias de la formación morada para que incremente de forma drástica el pago de impuestos a las empresas.

Mientras que Moscovici, momentos antes aseguraba que el crecimiento económico de España es sólido, pero advertía de nuevo que España tiene pendiente un ajuste del déficit estructural del 0,65% del PIB, Calviño ha asegurado que crecimiento, política social y disciplina fiscal son compatibles.

En su argumentación, la ministra de Economía ha asegurado que España sale ahora de una década perdida, con un crecimiento sostenible previsto del 2,7% para este año, pero con grandes evidencias de desigualdad, lo que da la idea de que “el sector público en realidad no lo ha hecho bien”.

Eso ha llevado, en su opinión, a un alto riesgo de que muchas personas se sientan fuera del sistema, víctima de una “inequidad cronificada”, y ha advertido de que ese es “el caldo de cultivo para el auge de los movimientos populistas”.

En ese punto, Calviño ha recalcado que parte de esta sociedad piensa que las autoridades le han fallado, pero ha ampliado la responsabilidad a otros ámbitos, también a las empresas. “Pido compromiso a las empresas para atajar los problemas de la sociedad”, ha dicho.

Las empresas tienen que invertir en formación

Por otro lado, Calviño también ha puesto el acento en la amplia dualidad del mercado de trabajo, que se ha manifestado en la alta rotación laboral que evidenciaron los datos de paro del mes agosto.

Al respecto, ha señalado que “es importante tener un mercado que invierta más en formación” para ganar productividad y reducir las desigualdades, mientras que actualmente, precisamente esa rotación laboral, desincentiva a las empresas a formar a sus trabajadores.

Dicho esto, Calviño ha vuelto a enviar otro mensaje a las empresas: “Es el momento de tomar decisiones para resolver la pobreza, la brecha de renta y tomar decisiones política. El Gobierno tiene la determinación para poner estas medidas en marcha y sería ideal que todos remásemos en la misma dirección. Espero contar con el compromiso de la comunidad empresarial”, ha remachado.