Una fuerte tormenta está afectando en la noche de este miércoles al noreste de la capital de España, interrumpiendo de manera significativa el servicio en el aeropuerto de Madrid-Barajas. Las operaciones se han espaciado por las condiciones meteorológicas para garantizar la seguridad y se están produciendo fuertes demoras en los vuelos que tienen que aterrizar en Madrid.

La gran mayoría de ellos están sobrevolando el centro de la península en protocolo de espera y algunos de ellos ya han sido desviados a otros aeropuertos. Esta situación está llegando a doblar el tiempo de vuelo de algunas rutas, como las que llegan a Madrid desde Oporto, Galicia u Oviedo. Se trata de vuelos de aproximadamente una hora de duración que, este miércoles, estarán casi dos horas en el aire, si finalmente consiguen aterrizar en la capital.

Otros vuelos, ante la saturación del espacio aéreo colindante al aeropuerto de Barajas, ya han sido desviados por los controladores a otros aeropuertos del mediterráneo. El pronóstico del tiempo, no obstante, mejora a partir de la medianoche en Madrid y se espera que las tormentas remitan.