Una factura que sigue creciendo. El coste del rescate bancario para las arcas públicas vuelve a engordar, según el balance ofrecido este miércoles por el Banco de España, en el que eleva a 42.561 millones de euros las pérdidas estimadas por el dinero público comprometido en el rescate del sector.

La cifra ofrecida por el Banco de España, basada en datos a cierre de 2018, representa un incremento de 544 millones de euros respecto a la ofrecida el año anterior, un incremento que se explica en gran medida por la reducción de las cuantías recuperables estimadas en Bankia y BMN y por el deterioro de la valoración de la inversión realizada en Sareb.

La cifra se incrementa en el último año en 544 millones por el deterioro de la inversión en Bankia y Sareb

Así, mientras que el organismo que dirige Pablo Hernández de Cos asumía con los datos a cierre de 2017 que se podrían recuperar 9.857 millones de euros de la inversión realizada en Bankia y BMN, un año después esta cifra -basada en la valoración que da al Frob a su participación en ambas entidades, ya integradas- se ve reducida a 9.560 millones.

La negativa evolución en bolsa de las acciones de Bankia a lo largo de 2019 hace presumir que las pérdidas estimadas en el rescate de la entidad (que actualmente se cifran en 14.509 millones) vuelvan a registrar un nuevo incremento al cierre del presente ejercicio.

Asimismo, la evolución de la inversión pública en Sareb, el denominado banco malo, ha sufrido un nuevo revés en el último año, suponiendo al cierre de 2018 unas pérdidas de 2.024 millones de euros, 382 millones más que un año antes.

En total, en el rescate de la banca se comprometieron ayudas por 56.679 millones de euros de dinero público, de los que se han recuperado 4.477 millones y se aspira a recuperar otros 9.560 millones, por medio de la participación en Bankia y BMN.

Coste para el sector

Todos estos ajustes elevan el total del rescate financiero hasta los 65.725 millones de euros, frente a los 64.349 millones de euros en que se valoraba al cierre de 2017. Esta cifra no sólo contempla las ayudas públicas sino las aportaciones realizadas por el propio sector financiero a través del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), que ascienden a 23.164 millones de euros.

El coste del rescate supera los 65.000 millones si se tienen en cuenta las aportaciones del Fondo de Garantía de Depósitos

Estas aportaciones también se han visto incrementadas en el último año, principalmente por el aumento del coste de los rescates de la CAM y de Unnim, debido al esquema de garantías con el que fueron traspasadas a sus compradores, Sabadell y BBVA, respectivamente.

Con todo, el de Bankia-BMN se mantiene como el rescate más costoso durante la crisis, con una factura total estimada de 14.509 millones de euros, mientras que la de la CAM, asumida por el FGD, asciende a 12.458 millones de euros, superando los 11.817 millones de dinero público comprometidos en el rescate de Catalunya Banc, aunque a esta habría que sumar otros 887 millones aportados por el FGD.