La bolsa española cerró este martes el que, con todas las incertidumbres registradas, se ha convertido en su mejor ejercicio desde 2013. El mercado español fue capaz de sobreponerse, con el auxilio de los bancos centrales, a un sinfín de dificultades que, por momentos, amenazaron con hacer de 2019 otro ejercicio dañino para los inversores.

Lógicamente, en ese buen desempeño general resaltan una serie de compañías que han obtenido unos resultados más favorables, junto a otras que han causado mayores disgustos a sus accionistas. Y entre éstos últimos vuelven a situarse los bancos, aunque en esta ocasión con resultados muy dispares entre entidades.

Así, mientras BBVA ha sido capaz de sortear los escándalos judiciales y las dudas registradas en algunos de sus principales mercados internacionales (México, Argentina o Turquía) para salvar el año con ganancias del XXX%, Bankia vuelve a dejarse una parte importante su valor sobre el parqué, al retroceder en torno al XX%, muy penalizado por la dependencia de su negocio de unos tipos de interés que no terminan de repuntar.

CaixaBank, que se dejó un XX% de su valor, o Bankinter, con recortes del XX%, refrendan el mal año del sector financiero, que también ha tenido su reflejo fuera del Ibex, con las caídas del XX% y el XX%, respectivamente, de Unicaja y Liberbank.

Fuera de la banca, resalta, un año más, Telefónica por su débil comportamiento. La operadora, que ha llegado a registrar sus peores niveles en más de dos décadas sigue luchando con un negocio con escasas perspectivas de crecimiento y una pesada deuda que le han llevado a perder el favor de los inversores. La recuperación emprendida en el último tramo del año ha vuelto a perder fuerza en las últimas semanas, recrudeciendo el escepticismo sobre el potencial de la compañía.

Mayor ha sido, en cualquier caso, el revés encajado por Ence, que ha visto esfumarse casi un tercio de su valor, golpeado por la batalla legal que amenaza a su fábrica en Vigo.

El mal tono de estas compañías lastra, pero no empaña, el buen hacer de un buen número de empresas, que cierran un año con registros nada despreciables. Es el caso de Cellnex Telecom, que se ha confirmado como el mejor valor de la bolsa española en los últimos años. Sus tasas de crecimiento se han visto reforzadas con una serie de compras que han obtenido el plácet de los inversores, con ganancias próximas al 100%.

Algo distanciados, aunque no por ello con números menos elogiables, se sitúan compañías como Ferrovial, Siemens Gamesa e Inditex, que firman alzas que se sitúan entre el 57 y el 47%. Especialmente relevante ha sido la recuperación del grupo textil, que ha vuelto a alcanzar los 100.000 millones de euros de capitalización tras despejar las dudas que le habían atosigado durante los dos últimos años.

Entre las grandes compañías también resulta reseñable el rendimiento de Iberdrola, que con unas ganancias que rozan el 40% se consolida como el tercer mayor valor de la bolsa española, con una valoración cercana a los 60.000 millones, disputando, incluso, el segundo lugar a Banco Santander, que cierra el ejercicio con un modesto repunte del XX%.

Escalada de Pharmamar

Entre las compañías del Indice General, sobresale Pharmamar, con unas ganancias que sobrepasan el 200%, auspiciadas por los avances en la comercialización de una serie de medicamentos. La siempre volátil Abengoa también ha registrado -en el caso de sus acciones Clase B- ganancias próximas al XX%.

En el lado opuesto, se sitúan compañías en dificultades financieras como el fabricante de aceite Deoleo o la compañía de ingeniería Duro Felguera, que han sufrido caídas en el entorno del 50 y el 40%, respectivamente.