La subida de las bases máximas de cotización es una de las opciones que estudia el Ejecutivo de Pedro Sánchez para incrementar los ingresos públicos y así poder destinar más dinero a gasto social. Un destope que fuentes del sector empresarial cifran cercano al 3%.

Se trata de una medida que podría aprobarse en las próximas semanas y que se sumaría al incremento del 7% que se aprobó para las bases máximas de cotización para el pasado ejercicio y que las situó en los 4.070 euros mensuales.

Tras el aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) aprobado recientemente, la base mínima de cotización quedó fijada en los 1.108 euros mensuales. La cotización es la cantidad que retiene la Seguridad Social y que se destina al pago de las pensiones, de la cual el trabajador aporta el 4,7% y la empresa un 23,6%.

La aportación está regulada por las bases de cotización, que varían en función del salario. Sin embargo, las aportaciones tienen límite, tanto a la baja, como al alza. Lo que pretende el Gobierno con el destope es aumentar el límite máximo de aportación a la Seguridad Social, para así, recaudar más fondos públicos.

No es la primera vez que se plantea, Moncloa ya lo puso sobre la mesa en junio de 2018 y la medida se estudió en la Comisión del Pacto de Toledo, aunque se encontró con el rechazo de las organizaciones empresariales. ¿El motivo? El destope de las cotizaciones máximas incrementa los costes laborales, puesto que serían las empresas y también los trabajadores quienes deberían abonar mayor cantidad a la Seguridad Social.

Para 2019 se acordó una subida del 7% aunque inicialmente se había planteado de un 10%

Finalmente, para 2019 se acordó una subida del 7% aunque inicialmente se había planteado de un 10%. Este incremento afectó a 1,2 millones de personas y supuso -según los cálculos del Gobierno- unos ingresos de 850 millones de euros, la suma entre las aportaciones de los trabajadores y las de las empresas.

UGT propone un plan plurianual

Por otra parte, la subida de las bases máximas de cotización cuenta con el visto bueno de los sindicatos. De hecho, UGT propuso al ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, un plan “plurianual” para el destope de las cotizaciones máximas. El secretario general del sindicato, Pepe Álvarez, estimó en 7.000 millones la “recaudación en juego”.

UGT propuso al ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, un plan “plurianual” para el destope de las cotizaciones máximas

En este plan, UGT proponía que se explicase a las empresas cómo se iban a ir modificando las cotizaciones y también las pensiones, puesto que el sindicato abogaba por subir también las pensiones máximas. Una consecuencia en la que no están de acuerdo todas las fuerzas políticas. Es el caso de Unidas Podemos, que defendía la eliminación del tope máximo de las cotizaciones sin necesidad de incrementar la pensión máxima en igual proporción.

Negativa empresarial

De producirse en las próximas semanas, la subida de las bases máximas de cotización volvería a encontrarse con la negativa de los empresarios. Este lunes, el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, ha advertido de que añadir más cambios a nivel laboral y fiscal al escenario económico, solo creará más incertidumbre en medio de la crisis del coronavirus. Una crisis que “afectará” a la economía y por la que Garamendi ha pedido que “se deje el campo en orden para que los empresarios puedan trabajar”.

Una encuesta elaborada por KPMG y la CEOE ha revelado que el 71% de los empresarios considera que la subida de las cotizaciones por el alza del Salario Mínimo Interprofesional tuvo un impacto negativo en sus compañías. El destope de las cotizaciones máximas también impactaría en los gastos empresariales.