El protagonista de esta historia nació en 1962, un año importante para la conectividad global ya que se produjo el lanzamiento de Telstar 1, un satélite que hacía posible, por primera vez, la transmisión televisiva entre Estados Unidos, Europa y Japón. Esta efeméride, sin embargo, no es la única que conecta a José Miguel García con las telecomunicaciones.

García, como si fuese un cable submarino que une las comunicaciones del mundo, ha trabajado en 16 países. Empezando por las antípodas, el actual consejero delegado de Euskaltel vivió 10 años en Australia. Allí se licenció en Ingeniería de Electricidad y Electrónica y cursó un máster en Comunicaciones digitales en la Universidad Monash de Melbourne. 

Su carrera se inició en Lincoln Scott International donde trabajó como consultor de telecomunicaciones y tecnología. Además de la formación y la experiencia vital, de Australia también se trajo su apodo en el sector (el australiano) y un perfecto español con el acento de Melbourne. Pese a haber desempeñado su carrera entre Australia, Europa, Latinoamérica y Estados Unidos, José Miguel García considera a España como su campamento base.

Fundó Case Technology y fue su consejero delegado en España y Portugal. En el año 2000 dirigió su adquisición por parte de Cable & Wireless donde ocupó el mismo puesto en Panamá, España y Portugal y también fue vicepresidente ejecutivo en Europa y director general en Reino Unido y España. Justo en esta época conoció al empresario Leopoldo Fernández Pujals, que invirtió en Jazztel para fichar como revulsivo y relanzar la empresa.

Fue en 2006 cuando aterrizó en la teleco donde permaneció hasta la compra de la empresa por parte de Orange en 2015. Fuentes del sector lo definen como un estratega, capaz de generar valor en pocos meses para deleite de los fondos de inversión. García es experto en atraer clientes y convertir a las empresas que ha dirigido en un caramelo para operadores más grandes.

La estrategia

Precisamente, este perfil le ha hecho repetir la estrategia en la venta de Euskaltel a MásMóvil como ya lo hizo con Jazztel. “Tiene un gran potencial y visión para realizar políticas comerciales porque es un gran experto en marketing”, arguyen las voces consultadas. Como ejemplo, las fuentes señalan la estrategia con Virgin. “En los últimos meses la empresa vasca se ha volcado en publicitar esta marca con ofertas muy agresivas”, matizan.

La marca de Euskaltel ha conseguido arrancar con números más que aceptables y en apenas siete meses ha conseguido crecer en 70.000 clientes. La política de atracción es clara: ofertas agresivas con un contenido de calidad a un precio casi irresistible. Por ejemplo, la teleco regala durante un año Amazon Prime y ofrece un 50% de descuento en su factura durante los seis meses en Netflix.

El Grupo Euskaltel confirmó que los ingresos de esta marca crecieron en el último trimestre del año hasta los siete millones de euros, en línea con el fuerte aumento en la base de clientes. 

El olfato empresarial de García y los movimientos corporativos que ha ido realizando durante toda su carrera le han servido para ganar alrededor de 34 millones de euros brutos.

Directivo mejor pagado

En 2014 se convirtió en el consejero delegado mejor pagado del Ibex 35 al recibir un bonus de 15 millones de euros brutos, debido al beneficio bruto obtenido el año anterior por el ejercicio de las opciones sobre acciones de dos planes de retribución variable sin ejercer hasta el momento y que vencían en 2014. 

Durante su etapa al frente de Jazztel tuvo un salario medio de 800.000 euros brutos, según consta en los registros de la antigua operadora. El directivo llegó a sumar un montante de siete millones de euros, sin contar otras retribuciones en especie como acciones o dietas. 

Así, el ‘australiano’ se embolsó unos 24 millones de euros brutos durante su estancia en Jazztel. 

Pero si la jugada en la teleco absorbida por Orange le salió redonda, la de Euskaltel va por los mismos derroteros ya que por la OPA lanzada por MásMóvil la cúpula directiva se repartirá un total de 36 millones de euros, de los cuales siete millones irán íntegramente para José Miguel García. 

La retribución fija para el consejero delegado en la empresa vasca es de 376.000 euros brutos. No obstante, García y el resto de los directivos se aseguraron otro pellizco por la política de retribución variable.

En concreto, su sueldo podría incrementarse  al logro de objetivos ligados al flujo de caja operativo. Es decir, que podría beneficiarse de hasta un 4% del valor total creado para el accionista. Dicho plan era pagadero en un porcentaje de al menos el 75% en acciones de Euskaltel y el resto en efectivo.

No obstante, aunque esta situación podría tener lugar, un porcentaje significativo de los accionistas se mostró en contra de este movimiento durante la celebración de la junta de accionistas.