El año 2020 supuso un extraordinario desafío para las empresas de todos los sectores, pero las compañías de moda y textil han resultado especialmente perjudicadas por la crisis del Covid. Los sucesivos confinamientos decretados en todo el mundo y los consiguientes cierres han provocado el desplome de la venta al detalle en las tiendas físicas. Una coyuntura que ha puesto a prueba el dinamismo de las firmas y el grado de desarrollo e implantación de sus procesos de digitalización.

Aquellas compañías que más habían avanzado antes de la pandemia en el desarrollo del comercio online y de soluciones logísticas innovadoras son las que mejor han resistido el embate de la crisis vírica. Así lo demuestra la presentación de excelentes resultados parciales por parte de algunas de ellas, como Nike. O Zara, que tras presentar pérdidas por primera vez en su historia en el primer trimestre de 2020 consiguió cerrar el año con unos beneficios de más de 1.100 millones de euros.

Valor intangible, pero esencial

Los datos de 2020 que siguen apareciendo no hacen sino confirmar esta idea. El último de ellos es el Brand Finance Apparel 50, informe anual que mide el valor y la fortaleza de las marcas textiles más importantes del mundo. La consultora internacional analiza el valor de las ganancias relacionadas con la reputación de más de 5.000 marcas en más de 30 mercados, y entre ellas selecciona a las 50 más potentes globalmente. Este año, debido al impacto de la crisis del Covid, el valor total de las primeras marcas de moda y accesorios se ha reducido un 14 por ciento, algo menos de lo que preveía el informe de 2020 –una contracción de valor de hasta el 20 por ciento–.

A la cabeza sigue, por sexto año consecutivo, Nike. La multinacional norteamericana ha experimentado una reducción de su valor de marca, según Brand Finance, de en torno el 17,5 por ciento, hasta los 25.918 millones de euros. Le siguen Gucci, en segundo lugar, con un valor de marca de 13.280 millones de euros (un 16,6 por ciento menos que en 2020) y Louis Vuitton (12.649 millones de euros, un 15 por ciento menos) en el tercer escalón del podio.

La fortaleza de Inditex

La española Zara, marca de bandera del líder mundial del retail, Inditex, demuestra su solidez manteniendo la sexta posición del año pasado, con un valor de más de 11.200 millones de euros. La capacidad de reacción de la compañía, su versatilidad logística y el incremento de sus ventas online en un 77 por ciento han galvanizado el valor de marca de Zara pese a la caída de las ventas (un 27,9 para el total del grupo).

La otra representación española en el Top 50 de marcas de moda más valiosas viene de la mano de Loewe, que repite en el puesto 49 respecto a 2020. La firma madrileña de lujo obtiene no obstante el octavo puesto en el ranking de fortaleza de marca. Un índice –encabezado por la suiza Rolex, con una puntuación de 89,6 sobre 100– que se basa en factores como la inversión en marketing, la percepción de los clientes, la satisfacción de los empleados y la reputación corporativa. Con una puntuación de 82 sobre 100, Loewe consolida un prestigio labrado en los últimos años, gracias a la apuesta por la innovación del equipo creativo encabezado por el británico Jonathan Anderson.