Vueling prepara un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para 4.000 empleados. La aerolínea del grupo IAG ha trasladado a los sindicatos la voluntad de negociar un nuevo ajuste laboral por causas técnicas, organizativas o productivas (Etop) como el que también tienen intención de aplicar tanto Iberia como Air Europa.

La compañía lo dejaría sin efecto, eso sí, si finalmente hay acuerdo en la Mesa de diálogo social para extender los ERTE por fuerza mayor en las mismas condiciones por las que se rigen hasta ahora.

La low-cost que preside Marco Sansavini confía en que finalmente se extiendan los ERTE por fuerza mayor hasta al menos el 31 de enero de 2022. Pero la incertidumbre sobre la negociación de la prórroga le ha llevado a dar este paso adelantado por Expansión.

El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha asegurado este mismo viernes que será complicado que ambas partes lleguen a un acuerdo antes del martes por el planteamiento que ha hecho el Ejecutivo.

Vueling trasladó este jueves por la noche la intención de negociar el ERTE de cara a una temporada de otoño en la que todavía no se espera un fuerte repunte de las operaciones. De momento, el tráfico aéreo en España sí ha crecido considerablemente, pero se mantiene muy por debajo de los niveles de prepandemia en otros segmentos como los vuelos de negocios o los internacionales.

"Un ERTE negociado con la parte social es clave para garantizar que la producción de Vueling se distribuye de manera equitativa entre todos los tripulantes, entre ellos 1150 pilotos, y que el ERTE será proporcional a la actividad de la compañía", apuntan desde el Sindicato de Pilotos SEPLA.

El presidente de Iberia, Javier Sánchez-Prieto, aseguró este lunes que la compañía tiene que mantener en ERTE a entre el 30 y el 35% de su plantilla, unos 5.000 trabajadores. Por su parte, Globalia -la matriz de Air Europa- podría aplicarlo al 60% del total, unos 9.000 trabajadores.