Nervios. Otra vez. Esa es la palabra que escenifica el panorama económico cortoplacista. Cuando las bolsas europeas y mundiales no se habían recuperado de la crisis desatada por ómicron, la tensión geopolítica derivada por la posible invasión de Rusia en Ucrania ha derivado en una nueva jornada de bolsa teñida de rojo.

Los inversores han decidido vender ante el miedo de que Rusia penetre en Ucrania en los próximos días y el Ibex 35 ha retrocedido un 3,2%, perdiendo los 8.500 puntos. Los principales selectivos rusos se han hundido hasta un 8%. El índice de volatilidad (VIX) estadounidense, que mide el grado de inestabilidad en los mercados mundiales, se ha disparado este lunes un 20%, añadiendo aún más incertidumbre a la situación económica mundial.

Ni tan siquiera la alegría despertada dentro del sector de las telecomunicaciones durante la mañana ha servido para que las bolsas europeas pudieran tener cierto optimismo. Este lunes, Vodafone y Telefónica llegaron a tener subidas de hasta el 6% debido a los tambores de fusión que suenan en la empresa de telecomunicaciones británica. Sin embargo, tras acrecentarse la crisis geopolítica han borrado las ganancias.

Estados Unidos había dado instrucciones a las familias de sus diplomáticos que viven en Ucrania para que abandonaran el país, al considerar que existe un alto riesgo sostenido de invasión por parte de Rusia, que ha concentrado más de 100.000 soldados en su lado de la frontera con Ucrania desde finales del año pasado. 

Los índices norteamericanos, que iniciaron la sesión a las 15:00 hora española arrastran las pérdidas de Europa y el Dow Jones se anota descensos del 2,5%. el Dax alemán, otro de los parqués más importantes de Europa, se ha dejado un 3% por el camino.

Reino Unido también ha contribuido a que los inversores hayan retirado liquidez de los mercados ya que ha comenzado a retirar a parte del personal de su Embajada en Kiev.

"Parte del personal de la Embajada y sus familiares están siendo retirados de Kiev en respuesta a la creciente amenaza de Rusia. La Embajada británica permanece abierta y seguirá llevando a cabo trabajos esenciales", ha indicado el Ministerio de Exteriores de Reino Unido a través de una alerta de viaje.