Los trabajadores con contrato fijo discontinuo mayores de 52 años que se queden en paro tendrán derecho a un subsidio por desempleo de 463 euros al mes. Y podrán disfrutarlo hasta que lleguen a la edad ordinaria de jubilación, tal y como aprobó este martes el Consejo de Ministros.

Estos empleados hasta ahora estaban excluidos expresamente del subsidio por desempleo para mayores de 52 años. Así lo recogen los requisitos para acceder a él, aún visibles en la página web del Ministerio de Trabajo y Economía Social. En el apartado de "requisitos", los dos primeros son "1. Estar en desempleo", y "2. No tener la condición de persona trabajadora fija discontinua".

Esta condición se elimina ahora, a través de un real decreto, para conseguir equiparar los derechos de los trabajadores con un contrato fijo discontinuo a los del resto de asalariados, en un momento en que el Gobierno espera que se disparen los contratos de este tipo en cuanto la reforma laboral entre en vigor en su totalidad. El cambio forma parte del conjunto de medidas que acordó Trabajo con sindicatos y empresarios en diciembre.

Era un agravio histórico"

Carlos bravo, ccoo

"Hasta ahora las personas con contrato fijo discontinuo tenían una menor protección social por desempleo tanto en la duración de esos subsidios como porque se les había excluido el acceso a los subsidios para mayores de 52 años. Era una reivindicación antigua, un agravio histórico", ha asegurado el secretario confederal de Seguridad Social y Previsión Social de CCOO, Carlos Bravo. El sindicato calcula que en torno a 20.000 personas cada mes van a beneficiarse de la medida, y que el número crecerá con el tiempo por los cambios que traerá consigo la reforma laboral.

La prestación será de unos 463 euros al mes para todos los trabajadores, puesto que la ley establece que el subsidio por desempleo para mayores de 52 años debe ser igual al 80% del indicador público de renta de efectos múltiples (IPREM), que actualmente es de 579 euros mensuales (o 6.948 euros anuales). Además, desde 2019 este subsidio se cobra en su totalidad aunque ya se haya cumplido la edad para jubilarse anticipadamente y aunque el último trabajo del empleado fuese a tiempo parcial.

Además, con él se cotiza y la base de cotización será el 125% del tipo mínimo de cotización vigente en cada momento. Para acceder a este subsidio será necesario haber cotizado por desempleo durante seis años como mínimo a lo largo de toda su vida laboral y cumplir todos los requisitos, salvo la edad, para poder acceder a una pensión de jubilación.

Contrato fijo discontinuo: el contrato estrella de Yolanda Díaz

Hasta ahora, y sin este cambio, los beneficiarios del subsidio para desempleados mayores de 52 años lo perdían si accedían a una relación laboral de carácter fijo discontinuo. El cálculo del Ministerio de Trabajo es que unas 18.000 personas se van a ver beneficiadas cada mes "de forma inmediata". Dicho departamento no ha facilitado una estimación de cuánto va a costarle la medida al Gobierno.

El departamento de Yolanda Díaz busca que con el cambio "la estabilidad en el empleo se afiance en los sectores con actividades estacionarias o cíclicas". "Así, el impulso de la contratación indefinida y, en particular, del contrato fijo discontinuo, será compatible con protección asistencial por desempleo de los actuales beneficiarios del subsidio para personas desempleadas mayores de 52 años", han señalado.

Esto tiene que ver con que como consecuencia de la reforma laboral, que el Congreso validó en febrero, es muy probable que se disparen los contratos fijos discontinuos. Uno de los principales objetivos de la reforma es impulsar la contratación indefinida por encima de la temporal, de la que se abusa en España, según el Gobierno.

Con el cambio legislativo, el contrato temporal solo podrá utilizarse en situaciones previsibles durante 90 días no consecutivos cada año. Eso llevará a los empresarios de la agricultura a convertir a miles de trabajadores en fijos discontinuos, un tipo de contrato indefinido que implica entre otros, a que el despido de estos empleados se encarezca. La parte de contratación de la reforma laboral entra en vigor el 1 de abril, puesto que en la ley -del 31 de diciembre- se recogía un régimen transitorio hasta el 30 de marzo.

Aunque en este aspecto algunos sectores han chocado con la visión del Gobierno. "Nosotros no podemos hacer fijos discontinuos a todos los trabajadores por las circunstancias del sector", explicó Juan José Álvarez, director de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), en una entrevista con este periódico. "Va a pasar una cosa: se va a destruir empleo y va a dar lugar a que tengamos que cambiar de producciones y cultivos", advirtió.