Solo uno de cada 100 contratos firmados este mes de octubre eran fijos discontinuos. En concreto, 29.000 de los más de 1,8 millones de nuevos contratos que se formalizaron. Se trata del modelo que la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, quiere impulsar a través de la reforma laboral, ya que se trata de un tipo de indefinido (menos precario que los contratos temporales) pero que todavía no se ha asentado en España, a pesar de que lleva presente en la legislación desde 1980.

Las cifras, que ha publicado este miércoles el Ministerio de Trabajo, apuntan a que el mes pasado se ha firmado un 25% menos de contratos fijos discontinuos que en septiembre, aunque han representado un 23% más de los que se registraron en el mismo mes del año pasado.

A nivel general, el comportamiento ha sido similar: se ha firmado un 8% menos de contratos indefinidos, en general, frente a septiembre, pero frente a octubre de 2020 han aumentado un 30%.

Con respecto al total de contratos existentes en España, de los 19,7 millones de afiliados a la Seguridad Social, los fijos discontinuos suponen el 3% (451.163 personas), un 50% más que las que había hace una década. La mayoría de estos trabajan en sectores como el turismo, la hostelería o la agricultura.

Fuente: Infojobs

En total, este octubre se han registrado 1.892.584 contratos, un 22% más que hace un año. Uno de cada 10 han tenido carácter indefinido (198.496), y, dentro de estos, 113.447 eran a tiempo completo y 85.049 a tiempo parcial. Del resto, hasta llegar al total de 1,8 millones, 12.076 eran de carácter formativo y 1.682.012 otro tipo de contratos temporales.

Esta inmensa mayoría que suponen los contratos temporales es la que Trabajo quiere revertir a través de la reforma laboral. No lo esconde: "El objetivo más importante de todos [dentro de la reforma laboral] es reforzar la estabilidad en el empleo, hacer que nuestro país deje de ser ese planeta alejado que no tiene ningún tipo de asidero en ningún otro país de Europa", ha expresado este miércoles el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, en la rueda de prensa de los datos del paro.

"Se trabaja en una reforma laboral que sirva para romper con las dinámicas del mercado de trabajo español que son las que más nos alejan de Europa, que son el paro y la temporalidad", ha recalcado el portavoz del Ministerio. En ese aspecto, ha asegurado que en Trabajo esperan "que la reforma laboral sea muy positiva".

Su Ministerio, que está al frente de la reforma laboral que se negocia con los sindicatos y empresarios desde el pasado marzo (aunque desde esta semana también están presentes en las reuniones el de Economía y el de Seguridad Social) ya ha subrayado en diferentes ocasiones que la situación es insostenible y han recalcado la necesidad de poner veto a la temporalidad para impulsar un empleo de mayor calidad en España.

La intención de dicho departamento, como ya ha explicado este medio, es terminar con el contrato de obra y servicio y el fijo de obra buscando que estos trabajadores pasen a ser indefinidos con contratos fijos discontinuo. Así, este tipo de contrato deberá usarse para trabajos de naturaleza estacional y vinculados a campañas, ya que se prohibirá el uso de contratos temporales para este fin.

Un borrador al que tuvo acceso este periódico recogía, en concreto, que los contratos temporales solo podrán usarse cuando se produzca un «incremento ocasional e imprevisible de la actividad empresarial que no pueda ser atendido por la plantilla habitual de la empresa», pero «en ningún caso» «podrá utilizarse para atender trabajos vinculados a la actividad normal y permanente de la empresa».

Es por eso que, si todo sigue tal y como se ha planteado hasta ahora, esta reforma de los contratos temporales dentro de la reforma laboral golpeará sobre todo a la agricultura, pesca y construcción, los sectores que actualmente reclutan a más trabajadores con contratos temporales de obra y servicio, modalidad que pretende eliminarse.

"La negociación de la reforma laboral no está todavía cerrada y queda mucho camino por recorrer hasta su aprobación final, pero es evidente que a los contratos fijos discontinuos les queda margen de crecimiento. El reto estará en lograrlo sin interrumpir la buena evolución del conjunto del mercado laboral que han confirmado los datos de afiliación y paro registrado de octubre", destacan desde el portal de búsqueda de empleo Infojobs.

Igualmente, en Infojobs opinan que el impulso a estos contratos "aportaría estabilidad laboral al empleado", ya que "sabe que podrá contar con ese empleo de forma recurrente durante el tiempo fijado y hacerlo en igualdad de condiciones con el resto de los trabajadores de la plantilla". "Y, en paralelo, puede planificar se para cobrar la prestación por desempleo o trabajar en otros empleos en los períodos de inactividad", subrayan.

El Gobierno ha prometido a Bruselas que llevará a cabo esta reducción de los tipos de contratos a tres (el indefinido o «estable», el temporal y el de formación), como se constata en el componente número 23 (Nuevas políticas públicas para un mercado de trabajo dinámico, resiliente e inclusivo) del Plan de Recuperación enviado a la Comisión Europea. Actualmente existen 33 tipos de contratos en España.