La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, en el Congreso junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
El producto interior bruto (PIB) español no crecerá este año un 7%, como mantiene el Gobierno, sino que lo hará un 4,3%, casi tres puntos por debajo, según las nuevas previsiones macroeconómicas de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF). En 2021 el PIB sumó un 5,1% y en 2020 cayó un 10,8%.
La invasión rusa de Ucrania ha repercutido fuertemente sobre la economía de todo el mundo y de forma especial sobre la española, sobre todo a través del aumento del precio de la energía y de los problemas de suministro, lo que lleva al organismo a corregir sus propios pronósticos de otoño, en los que estimaba que España avanzaría un 6,3% este año.
Ahora la AIReF considera que la recuperación de la economía hasta alcanzar niveles prepandemia se retrasa hasta el segundo trimestre de 2023. Este martes el Banco de España también retrasó la recuperación, pero la situó en el tercer trimestre del próximo año.
En cuando al incremento de los precios, la AIReF prevé que la inflación media este año se sitúe en el 6,2%, frente al 1,8% que estimaba anteriormente. El IPC medio de 2021 fue del 3,1%, pero este año el encarecimiento de los productos y servicios está siendo aún mayor, alcanzando el 9,8% en marzo, un salto no visto en 37 años.
En su informe sobre los presupuestos iniciales de las Administraciones Públicas 2022, publicado este jueves, la AIReF advierte del peligro que supone esta elevada inflación. "El repunte de la inflación es el mayor foco de riesgos", ha dejado claro la directora de la División de Análisis Económico, Esther Gordo, aunque después han aclarado que descartan por completo un escenario de estanflación, ya que este fenómeno describe un supuesto en que la economía no crece mientras la inflación es muy elevado, y actualmente sí prevén que el PIB siga creciendo.
En cuanto al déficit, AIReF cree que este año será menor del inicialmente previsto, del 4,2% del PIB, cuando en otoño estimaba un 4,8%. La sorpresa positiva está relacionada con los mayores ingresos registrados tanto el año pasado como este, que superan el coste de las medidas fiscales aprobadas para hacer frente al impacto de la guerra. La ratio de deuda sobre PIB, por su lado, descenderá hasta el 113,9% en el año 2022, 4,5 puntos menor que el porcentaje registrado en 2021.
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